viernes, 23 de julio de 2021

RELATOS SEMANA 66

 


Autor desconocido



RELATO 1

Nocturnos

Cae la noche sobre el día dos del estado de alarma.

Un hombre mira por su ventana, es posible que sea un héroe,  generoso, traidor, artista, divertido, mezquino, esté preocupado, o tal vez es un santo.

Entonces el tipo mira por la ventana, a otro tipo, que también mira por la ventana y se pregunta si él siente la misma congoja por el futuro  que ahora mismo el siente y también si se pregunta por lo que vendrá después, cuando la gente empiece a sufrir. Quizá también habrá cocinado, haya hablado con alguien o se sienta también tremendamente solo.

RELATO 2

El ritmo de la ciudad

Llegué a la ciudad dejando atrás el sosiego del campo.
Necesitaba dar rienda suelta a todas las inquietudes que me bullían por dentro.
Ante mí se abría un mundo nuevo por descubrir...

Me maravilló la cadencia del ritmo que la mueve: frenético cuando empieza a ser bañada por los primeros rayos de sol, y pausado cuando el crepúsculo la atrapa.

Soy un observador de todo lo que acontece en ella.
Por el día paseo por sus calles descubriendo sus rincones secretos...por la noche es ella la que me los muestra a través de los grandes ventanales de sus edificios.

RELATO 3🥈

AJUSTE DE CUENTAS

_Saca del bolsillo un trozo de papel arrugado y lee:_

_Desde la medianería Oeste, en sentido ascendente contar siete plantas, y... ¿Cinco en horizontal?_

- ¿Es un cinco? Eso parece... ¡Ahí está!

_Monta su arma ceremonialmente, se posiciona... Inhala y exhala aire lentamente, reposa la respiración... Está en su mirilla... ¡¡¡Taccccc!!!_

- ¡Touche! Soy infalible.

_Al día siguiente compra la prensa:_

_"El FBI no encuentra explicación del porqué el catedrático de Filología Hispánica, Don Roberto Sanz, recientemente llegado desde España a la Columbia University, muere asesinado."_

_El sicario saca precipitadamente del bolsillo el trozo de papel que aún conservaba._

- ¡¡¡Era un seis!!!

RELATO 4🏵️

Súper papá

Érase una vez un monstruo muy grande, muy grande, que engullía a unas mil personas cada mañana.

Horas después, cuando ya había extraído de ellas todo lo que necesitaba, las vomitaba.

Las personas salían de su estómago muy cansadas, con la energía justa para llegar a casa en tren, en coche o en autobús y, con suerte, poder ver a sus hijos antes de que se durmieran.

Papá es una de esas personas que el monstruo vomita, pero no os preocupéis porque tengo un súper poder secreto para conseguir llegar a tiempo de contaros un cuento y daros un beso.

RELATO 5🏵️

Con vistas

- Mamá, mamá,  ¿tú crees que los que viven allí estarán más calentitos que nosotros?
- Con este abrazo de oso tú vas a estar muy , pero que muy calentito.
- Mamá, mamá, ¿tú crees que allí estarán más limpitos?
- Con esta lamida de vaca que te voy a dar, tú si que vas a estar brillante y reluciente.
- Mamá, mamá, ¿tú crees que ellos saben que vivimos debajo del puente?
- No creo,  pero con estas vistas y el techo de estrellas que tenemos para nosotros solos, mejor que no se enteren.
Vaya que quieran venirse todos a vivir aquí.

RELATO 6

Geometría

Cuando alguien decidió matematizar nuestros espacios vitales, también decidió gibarizarnos hasta extremos patológicos al introducirnos en una segunda Naturaleza donde las flores solían ser de plástico y donde la Pachamama se reducía, en el mejor de los casos, a la maceta de marihuana próxima a la ventana de la cocina. Por allí entraban algunos rayos solares allá  por mayo de diez a doce horas... También los gemidos amorosos de los vecinos, los ruidos de los programas televisivos basura y las broncas y palizas con su mujer de Juan, cuando llegaba de madrugada a su casa borracho. El infierno está  aquí.

RELATO 7

La estética del caos

Si bien todas las ventanas permiten el paso de la luz y nos enseñan el mundo, son muros que dividen, que separan vidas. Sin ellas, te vería directamente y no a través de un cristal.
Tu vida es mirar el desorden que fluye a los pies de una ventana, y en ese caos, lo atractivo, la "estética", soy yo. 
Distingo tu media sonrisa al verme pasar, cuando marcho a comprar el pan, al médico,  a la farmacia o en mi paseo nocturno.
Sé que me estás mirando y te mando, telepáticamente, mi único deseo: "Abre la ventana y ven conmigo".

RELATO 8

Un rincón de Nueva York

Recuerdo el instante en que solté la maleta y corrí a asomarme por la ventana. Incliné la cabeza hacia abajo y contemplé embobado la carretera rebosante de coches.

Levanté la vista y el edificio frente a mí me ofreció una perspectiva muy nítida del interior de las casas. Ventanas descubiertas que invitaban a navegar por cada una de ellas.

Un año después, aun acostumbrado a la cultura americana, me sigue fascinando sentarme y contemplar lo que sucede detrás de cada cuadrado.

No son más que personas viviendo su vida de la forma que ellos desean.

RELATO 9

Un espía escurridizo

Andrés recorría cada recoveco y cada resquicio del edifico, recabando las historias de las personas que allí vivían , esta noche les toco al grupo de estudiantes que tienen alquilado el piso.

Ayer celebraron una fiesta y liaron un jaleo impresionante, todo el edificio despertó súbitamente, no por la música, no ; mas bien por que el borracho de Fabián, activó las alarmas de incendio, al intentar hacer un flambeado con mucho alcohol.

Fue gracioso ver a todos correr de un lado para otro como títere sin cabeza... jajajajaja

Pero bueno que sabrá de humor,  un simple ratón con sombrero y gabardina...

RELATO 10🥉

CARTA DE RENUNCIA

Manifiesto con esta carta mi irrevocable renuncia.
Renuncio a esta profesión tan injusta sin días de descanso.
Renuncio al desprecio al que he sido condenado para la eternidad. (No sin razón). 

No puedo más. Estoy cansado de vagar cada noche sin rumbo por las calles de la ciudad; mirando a las ventanas que me muestran con insultante descaro vuestras vidas perfectas: niños revoltosos, cenas románticas, fiestas interminables, amantes gimiendo de placer...
Como vosotros, quiero vivir.
Si alguna noche el miedo por mi recuerdo os impedía conciliar el sueño, os pido perdón. No era mi intención.

Atentamente.

El Hombre del Saco.

RELATO 11

El prismático del voyeur

Las ventanas encendidas muestran siluetas borrosas.
Oculto, el mirón , enfoca y gradúa obsesivamente mis lentes con sus dedos grasientos.
Un griterío alegra el primer piso. La soledad habita el tercero. La nostalgia, el maltrato, la placidez y Diógenes conjugan sus sombras inquietas por los rectángulos iluminados del edificio de enfrente. Una noche cayó una mujer violada esparciendo su mancha morada sobre nuestras almas.

Panóptica perspectiva.

El voyeur termina dejándome abandonado sobre el poyete de la ventana, entonces, enfoco la calle.
Ayer presencié el desahucio de Manuela.
Pero al ojo indiscreto sólo le obsesiona el centro de la vagina del 5ºB.

RELATO 12

Historia de una obsesión

Intento recordar tu rostro, pero no soy capaz.
Iba demasiado borracho.
Sólo recuerdo tu olor y tu sudor en mi piel.
Y tu cabello oscuro y húmedo acariciando mi frente.

Intento recordar cómo llegué a mi casa pero sólo recuerdo mi habitación girando....girando.

He regresado cada día a aquel edificio donde todo comenzó a desmoronarse, porque yo ya no tengo vida sin tí.
Aunque no te recuerdo.

Observo cada noche las ventanas iluminadas por si reconozco tu silueta o por si te veo entrar en el portal, abordando indiscriminadamente a cualquiera.

Pero nunca eres tú.

Me mata esta obsesión.

RELATO 13

¿Sombrío?

Un edificio sombrío,no tenía
ascensor, calefacción…
La pobreza se respiraba,por el moho que tapizaba las paredes.Entre las que se mezclaba el bullicio de los niños.
Se fue huyendo de la miseria.
Pero ese edificio frio y oscuro por fuera, por dentro la gente que lo habitaba, le daban calor, luminosidad, eran su familia. Siempre el dolor de uno, era el de todos, lo mismo la alegría.
Se hizo rico. En su numerosos viaje, nunca encontró ese cariño verdadero.                                     Había envejecido. Decidió regresar a su hogar; ese su viejo edificio.                      Llegó, en su sitio encontró una autopista.

RELATO 14

CIRUGÍA ARQUITESTÉTICA

Poseía un aire romántico y un precioso porche, con sol de mañana y jazmines, donde los biznagueros paraban a “tomar apuntes”.

Rezumaba armonía y buen gusto, con un patio central con arcada en el que, en verano, se podía disfrutar de buena sombra junto a la fuente. Muchas fueron las tardes que, los chiquillos de la casa, conectaban la manguera y se divertían refrescándose.

En mí residieron varias generaciones, hasta que mi decrepitud, tras un sospechoso incendio, secó mi belleza como la ropa tendida al sol. Entonces perdí el conocimiento. Cuando desperté, no me reconocía.

RELATO 15

EL LADRÓN DE VIDAS

Desde mi ventana me dedico a espiar a mis vecinos del bloque de enfrente.
Veo a la chica del cuarto llegando a casa, despojándose  del abrigo y corriendo al baño. Al del quinto intentando enseñar al loro a hablar. La maestra de piano del tercero y sus alumnos, la viuda del primero, siempre llorando... Yo soy todos ellos, hago mías sus vidas. Las miro un momento por mi ventana y  las recreo  en mi imaginación.  Es lo único que me ha quedado después del accidente que me dejó postrado en cama. Lo confieso, soy un voyeur, y robo vidas.

RELATO 16

Sólo en la ciudad

Es de noche, continúa el calor.
Tantos vecinos, pero me siento sólo.
Se oyen sirenas a lo lejos, policía, bomberos, ambulancias, sin descansar.
Hay una historia detrás de cada ventana, hay un infierno diferente detrás de cada cristal.
Casi todas las luces estaban encendidas, yo esperaba a quién no llegará.
La madrugada tiene tu sabor, ese frío que envuelve la sensación de nostalgia.
Observo en la pared la línea de luz que entra por la ventana, tu imagen borrosa, casi irreconocible, pero la esencia sigue allí.
Tú siempre estás, no te vas.
Eres un sueño recurrente, como un viaje interminable.

RELATO 17

TODA LA NOCHE JUNTOS

Como un hombre lobo tras una noche de luna llena, despertó desnudo, desorientado, tenía los nudillos raspados y un corte en la ceja.

Aún era de noche. Se levantó, apoyó la frente en el frío cristal de su ventana y soltó un largo suspiro. Observó el edificio de en frente, lleno de ventanas.

La pantalla del móvil iluminó la habitación.

- ¿Sí?
- ¿Qué cojones hiciste anoche?
- No recuerdo casi nada
- ¿Y qué les digo a los del FBI? están haciendo demasiadas preguntas
- Diles que estuvimos juntos toda la noche
- Pero…
- ¡Toda la noche!, ¿entendido?

RELATO 18🥇

NUEVE FOGONAZOS

Yo vivía en la calle 14 entonces, frontera del bajo Manhattan. Cada tarde me sentaba al teclado a escribir. Alzaba la vista para ver como la luz celeste daba paso a la oscuridad y la ciudad se llenaba de luciérnagas colgando de las fachadas.
Un día, unos fogonazos de luz desde el edificio de enfrente llamaron mi atención. Después se repitieron cada tarde, durante un mes. Contaba nueve fogonazos de distinta duración.
Una mañana, la policía acordonaba el edificio. Una mujer había saltado al vacío tras un mes de secuestro.

Aterrada, supe que S.O.S morse son nueve fogonazos de luz.

RELATO 19🏵️

LA NORMALIDAD MÁS ABSOLUTA

Los cinco minutos de más del despertador, el dolor de pies tras haberlo dado todo en un concierto de mi grupo preferido,  el buenos días con sonrisa de mi portero,  escuchar las carcajadas de mi amiga delante de una cerveza fría, comerme el pico del pan mientras llego a casa, apagar la última luz del salón y saber que todos están,  el ritmo pausado de los domingos, los rayos de sol en febrero … ahora solo puedo pensar en ello.
Añoras que la vida te sorprenda con su cotidianidad cuando la ves pasar desde la ventana de un hospital .

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