![]() |
Foto: Sandra Marcos |
RELATO 1
NUESTRA VENTANA
Es una de esas noches de humedad sofocante.
Las luces traseras de los coches tiñen el salón de rojo. Recuerdo la tarde que vinimos a ver este apartamento, nada más entrar supimos que sería nuestro hogar.
Mientras te espero, dibujo flores infantiles con los dedos en el cristal empañado de la ventana. Desde niña me gusta hacerlo, y observar las carreras de gotas liberadas precipitándose cristal abajo, en un descenso torpe y zigzagueante.
La lluvia golpea el tejado aumentando mi melancolía.
Me pregunto cuánto tiempo más me llevará aceptar que el pasado no vuelve... Ni tú tampoco.. RELATO 2
EL GRITO
Paula dió mil vueltas en la cama para dormirse, estaba nerviosa.
De madrugada, un ruido seco la despertó angustiada, se tapó la boca para sofocar el grito.
Su gata había volcado un jarrón.
Le costó volver a dormirse, tenía sudor frío.
Metió su cabeza bajo el edredón, ojos cerrados, mente en blanco, contuvo su respiración al oir el eco de otra respiración.
Saltó de la cama, y abalanzándose abrió la puerta del armario. No había nadie.
Apagó el despertador, otro ruido extraño.
Se giró y un desconocido salía de debajo de la cama.
Esta vez no pudo sofocar el grito.
RELATO 3
SECRETOS BAJO EL CRISTAL
Aquella noche, oculto entre las sombras, observó durante horas ese escaparate del Barrio Rojo en el que ella se exhibía. Se hacía llamar Luna.
Varios señores sin corbata entraron. Pudo ver, varias veces, su mano sofocada en la ventana del primer piso. Casi podía tocarla.
El chico dio un paso al frente, decidido. Ella sonrió al desconocido, con gesto ensayado, pero sus ojos revelaban miedo.
-¿Madre? Pregunta con voz temblorosa.
La mujer parpadea, queriendo atravesar sus pupilas.
Asiente. Entre lágrimas, le muestra la fotografía que lleva sujeta al cuello en forma de luna colgante: Ella lo sostiene entre sus brazos.
RELATO 4
LA MAGIA NO EXISTE
Estaba harta de las palizas, humillaciones y desprecios a los que su marido la sometía a diario. Los golpes del cuerpo se curaban, los del alma, la rompían sin remedio. Deseó con todas sus fuerzas poder huir, o en su defecto poder lanzarle un hechizo y dejarlo encerrado para siempre en una urna caliente, al rojo vivo. Tanto lo deseó, que se hizo realidad, ahora lo contemplaba desde su sillón, veía su mano de verdugo cruel golpeando el cristal caliente, y ella, por fin, disfrutando de su soledad…
¡Soledad, Soledad! Despierte, está en el hospital, a salvo por fin…
RELATO 5
ALGO PASA
Mis padres están reunidos, cenando como todas las noches. Siempre le pregunto a mi madre por qué yo ya nunca me siento a la mesa, por qué falta mi plato. Ella no me contesta. Parece ignorarme. Antes de acostarse abre la puerta de mi cuarto y creyendo que no la he visto la vuelve a cerrar.
Algo le pasa, ya no me besa, sólo llora.
Desde aquélla noche no son los mismos, ya no me hablan, sólo lloran. Mi madre siempre dice: no me lo perdonaré, no me lo perdonaré.
Mi padre hunde la mirada, no dice nada.
Sólo lloran.
RELATO 6
LOS COLORES DE CLARA
Clara dejó de tener emociones hace años, su deseo pasó a ser como esas piedras negras que encierran un tesoro revelado tras romperse.
Lo conoció de niño. Ella brillaba con luz multicolor aunque sentía la soledad infinita de la adolescencia.
Estos días se han vuelto a ver. Lo inverosímil y fortuito ha ocurrido, el deseo ha hecho añicos la barrera que los separaba.
Se rozan, se acarician, se huelen.
Nota fuegos artificiales en su interior y se deja llevar hasta que explotan. Clara se rompe en rojo.
¿Quién ha dicho que una mujer de sesenta no necesita desear?.
RELATO 7
UN SUEÑO ENFERMIZO
Ella siempre anheló tener una familia, la que nunca tuvo. Cuando Rober le pidió matrimonio, su vida empezó a tener sentido, soñaba con ser mamá y él era la persona ideal para hacer su sueño realidad. Llenos de amor, disfrutaban de la vida, viajes, cenas con amigos. Pasaron los años y el deseo de ser padres se convirtió en una obsesión enfermiza para ambos. La desesperación llegó a sus vidas.
Mientras tanto, Anael, la chica ucraniana que trabajó en casa durante un tiempo, hoy día desesperaba encerrada en el desván. Estaba embarazada.
Las sirenas de la policía anunciaron su liberación.
RELATO 8
LA CASA DE LOS GERANIOS ROJOS
Desde pequeña había calmado sus frustraciones rodeándose de geranios rojos, pues a su entender, ejercían una influencia sanadora como ninguna otra flor.
Si no le gustaba una película, compraba un geranio, y así actuaba ante cualquier motivo de insatisfacción.
Las rupturas sentimentales suponían 3 o 4 geranios.
Su casa era un vivero de color rojo y su mente se deterioraba al mismo ritmo que los geranios rojos invadían cada rincón de su hogar.
Una noche de desesperación, intentó huir por la ventana, pero una fragante e informe nebulosa roja lo impedía.
Decidió rendirse entonces.
Sintió ser un precioso geranio rojo.
RELATO 9
MÁS ALLÁ DE ORION
Rogelio, radioaficionado, friqui de la ufología. Hace tres años contactó con un planeta de la galaxia NGC4248 de la constelación de Canes. Me convenció para acompañarle al encuentro. Una nave descendió achicharrando un patatal que dejó como una franquicia del Paponazo. Entró en ella, no salió. Recuerdo su desesperación cuando despegaban entre luces estroboscópicas.
He recibido una señal radio suya: "Están creando un mundo paralelo con muestras del nuestro, pero algo va mal, jirafas cuellicortas, leones veganos, caracoles veloces como ferraris, melones del tamaño de una uva, girasoles lunares ..."
Dice que es feliz allí. Rogelio nunca fue de este mundo.
RELATO 10
EL VUELO DE LAS GARZAS
Él quería aprender a manejar la fotografía tradicional. Para ello acababa de adquirir una cámara Nikon y me pidió clases particulares. Aunque ya tengo bastante con mi trabajo de fotógrafa en una revista de decoración, acepté casi sin darme cuenta. En la primera clase subimos a un parador cercano a fotografiar garzas volando para más tarde enseñarle a positivarlas en el cuarto oscuro. Una vez allí dentro, entre bandejas, líquidos fijadores y bajo la cálida luz roja, un deseo irrefrenable fue revelándose entre nosotros, lentamente, como la imagen de las garzas al vuelo en el papel sumergido en el líquido.
RELATO 11
VENDAVAL DE PASIÓN
Nos miramos mientras conducías. De la noche colgaban estrellas pero sólo vimos nuestros ojos que hablaban de deseo.
Paraste en el ancho del arcén y tus manos recorrieron mi cuerpo, apagando el fuego que sólo tú me haces arder. Cada susurro era un canto a la gloria, cada beso prometía lo eterno, cada cacaricia tatuaba nuestra piel.
En el espacio reducido el mundo desapareció, y sólo existimos tú y yo envueltos por esa pasión que nos desborda. Cada segundo contaba y nuestros corazones bailaban al unísono una danza salvaje. Somos más que amantes, somos un vendaval de pasión indomable.
RELATO 12
SIN TREGUA
Las fieras atacaron en manada junto con afines y conquistaron la tierra, los bienes y la voluntad de la población. Durante el largo invierno que duró la ocupación, mediante el terror y la propaganda, los habitantes vivieron sometidos y atemorizados.
Con la muerte de los primeros llegó la primavera, bajó la tensión y pareció que la opresión había terminado, pero los cachorros de los cachorros ocupaban los puestos de poder y lo ejercían con mendacidad para que todo siguiera igual, ocultando la terrorífica historia y falseando la realidad.
Muchos, sin conocimiento ni memoria, creían las mentiras y los apoyaban convencidos.
RELATO 13
EL ARMARIO
Cuando sintió el golpe de la puerta, cerrándose como cada día, fue corriendo al armario de su marido. Sintió otra vez un tremendo alivio al ver todos los trajes colgando dentro. Repetía el gesto en cada una de sus mañanas, encerrarse en la oscuridad del armario, entre perchas, trajes, camisas, corbatas, para ahogar su angustia.
Nunca consiguió olvidar a su madre aquella mañana de invierno: Lloraba a gritos, dándose golpes en el rostro delante del armario sin trajes de su padre.
Las había dejado solas.
Ella era muy pequeña y hasta mucho después no entendió lo que era el vacío.
RELATO 14
BELLA CHAO
"¡Lucia, la guerra ha acabado, somos libres!"
Era el 25 de abril del 1945, en la plaza del pueblo había partisanos con los fusiles en bandolera y amplias sonrisas.
Tú, Igor llamado Falco, no estabas entre ellos.
Sonaban las campanas, banderas ondeaban sobre los tejados.
Qué paz tan extraña, mezcla de felicidad, nostalgia, rabia y amor.
Tú en las montañas para siempre, tu paz bajo la sombra de una hermosa flor.
Ahora, a los 97 años, algunas noches sigo soñando tu mano contra el cristal,
lágrimas de lluvia rojo sangre manchan mi cara, son el precio de nuestra libertad.
RELATO 15
INFIERNO EN ROJO
Aquel atardecer fue especialmente intenso...y tórrido.
La tenue neblina que había cubierto todo el periplo solar, se fue enrojeciendo a medida que se acercaba el ocaso.
Esos últimos rayos tiñeron de rojo la estancia en la que tú y yo dábamos rienda suelta a nuestras pasiones. El bochorno provocado por esa calima elevaba la temperatura a nuestro alrededor excitando aún más nuestro deseo.
Nuestros cuerpos sudorosos se contorsionaban sumidos en un loco desenfreno... hasta que aquella mano golpeó el cristal de la ventana.
A continuación, solo sentimos el acero atravesando nuestros cuerpos mientras una voz gritaba:
¡Bienvenidos al Infierno!
RELATO 16
OPERACIÓN TITANIC
Estábamos empezando a agobiarnos. Tras 20 minutos esperando, seguíamos sin recibir la señal de éxito de nuestro amigo. Le habíamos asegurado que la intuición femenina nunca falla y que ese encuentro sólo podía esconder un propósito muy concreto.
Prismáticos en mano, nos turnábamos para intentar averiguar qué sucedía en aquella minúscula estancia. Nuestra respuesta llegó cuando una mano abierta se posó con fuerza sobre la cristalera.
“¡SÍÍÍ! ¡Están consumando como Jack y Rose!”, grité entusiasmada.
“Después de cuatro meses de tonteo… ya era hora de que tuviesen sexo de película. Vámonos; parece que no va a necesitar nuestra ayuda”.
RELATO 17
CANDLE
Por un descuido, siendo pequeño vio la película: “Las dos vidas de Audrey Rose.”
Desde entonces se ensimismaba delante de la chimenea. El chisporroteo era música que le causaba placer.
Se casó y se divorció.
A través de la pintura expresaba, lo que no decía.
Todos sus cuadros oscuros e incandescentes, eran llamas moviéndose, con formas de mujer; unos se combinaban con flores llameantes, otros desgranaban cenizas.
Rompió el cristal que lo separaba de lo irreal.
Voló, robó “Candela” al sol, se envolvió en el anillo de fuego, de su amada.
Por fin fue Feliz.
RELATO 18
RESILIENCIA
El ambiente era cálido, dudé un momento, pero decidí acercarme. Ella estaba sentada en el sillón con la cabeza hacia atrás, la boca entreabierta y los ojos cerrados. Parecía tranquila.
Nada delataba lo que acababa de suceder.
Todavía estaba mojada la ducha. El vapor flotaba en la estancia.
Su mano había dejado la huella en el cristal y esa luz roja que tanto les gusta quedó encendida.
Hacía muy poco que él se había ido
Llevo tiempo sabiendo de su amante.
Pero no me importa..., la veo feliz...
Y al fin y al cabo,el que duerme con ella soy yo.
RELATO 19
DONDE SIEMPRE HE QUERIDO ESTAR
Con los _briefing_ recuperados del cajón, fui construyendo la estructura de lo que siempre había querido hacer para esta obra. Por fin pude contar con un equipo de profesionales, y con los medios necesarios para desarrollar lo imaginado.
Este ha sido el resultado de muchos años de trabajo y dedicación absoluta a lo que más amo, El Teatro.
Mi mayor premio como Director Escénico, es estar hoy aquí para ver plasmado en el escenario: la coreografía, la música, los efectos de iluminación, ambientación y escenografía, junto con la interpretación de mis actores, este montaje actualizado de _Bodas de Sangre._
No hay comentarios:
Publicar un comentario