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Foto: Café Lehmitz. Anders Petersen |
RELATO 1
A veces se encuentran a personas que resultan "familiares".
Darío la miró y supo que era ella. Empezaron una relación y todo fue genial al principio.
Pero después surgieron los monstruos de cada uno. Esos conflictos no eran más que sus carencias de la infancia. Reflejaron en el otro aquellos niños perdidos y suplicantes.
Entendieron que era tarea de cada cual hacer las paces con su pasado.
Perdonaron a papá y a mamá y les pidieron disculpas.
Sólo así pudieron tocar las estrellas, como dos naranjas completas que caminan juntas y mirando, ambos, hacia la misma dirección.
RELATO 2🥉
Fui madre de día y puta de noche. Pero la heroína me hizo ser mejor puta que madre, y aunque intenté, o quise intentar que mi hija tuviera otra vida, no lo conseguí.
La heroína nublaba mi dolor físico y mental, me llevaba de viaje, me hacía alcanzar orgasmos y me hizo creer que era capaz de cualquier cosa.
Lola no tuvo una madre, básicamente no tuvo de nada y sin darme cuenta le estaba empujando a seguir mis pasos.
Ahora cada noche un abismo nos sonríe y nos invita a caer juntas.
RELATO 3
Estoy aquí rebuscando en mi memoria la palabra justa, el comentario exacto que hacerte. No doy con el sentido preciso que aclare el mar de la amargura. Cada tara que la vida me creó es como uno de esos puntos, que unidos sobre papel, dibujarían mi cara.
RELATO 4
*LA VIDA APRIETA*
Yo también tenía sueños, no quise oír lo que me decían, los que me avisaban de lo peor de la vida.
Ven, apóyate en mí, pero no confíes en el amor, siempre nos traiciona.
- Un individuo va hacia ellas -
_¿Cuánto?_
RELATO 5
ENTRAÑAS
Gerda sucumbió ante la llamada de la cerveza barata. Con más hambre que frío, y con mas desesperación que aire en sus negros pulmones, sabía que ya nada podría hacer para salir de aquel miserable agujero.
Aguantó durante su vida de prostituta, palizas, humillaciones… todo, excepto no haber podido ver la carita de aquel niño que no llegó a nacer…
Ahora su joven cliente, borracho y drogado, lloraba y farfullaba palabras ininteligibles…”mutter, mutter” creyó entender.
Gerda lo dejó apoyarse en su hombro y le brindó lo único que le quedaba, su calor y el recuerdo de su bebé no-nato.
RELATO 6
MI AMIGA ESTANQUERA
Fui directa hasta el fondo del nuevo bar de la calle, estaba tan empetao como desierta la calle. Ernestina la dueña, me contó su pretensión de meter un socio y convertirlo en una wiskería. Después de la dueña se me enrolló el vecino del segundo; desde que lo conozco me tira los tiestos todos los dìas. Me fui del bar con un par de absentas bebidas compulsivamente y abrazada a mi amiga, la estanquera de Valdemorillo. Dando cambayás entramos en el parque, ¡¡lavín que gustito da mear!!.
RELATO 7
Juan
Se lo advertí muchas veces: "Juan: tu activismo ecologista se va a llevar por delante a toda la familia". Pero nunca me escuchó; su sentido de la justicia era insobornable y nunca le perdonaron aquel artículo perodístico que escribió relacionando al ministro de Economía con las mafias de la madera... Su quijotismo le hacía pasar largas temporadas en la selva intentando evitar el exterminio de las tribus autóctonas y las talas masivas de los bosques que hacían posible la existencia de las mismas... Su lucha fue inútil; ahora tu padre ya no existe, lo crucificaron junto a los rebeldes indígenas.
RELATO 8🥇
Mi madre hacía tiempo que estaba perdiendo la cabeza, disfrutaba exhibiéndose.
Todos los días el mismo ritual: Se ponía una minifalda y unos pantis rojos sujetos con unos ligueros negros, tan gordos que parecían tirantes. Corríamos al bar a por una copa y cuando veía entrar a un hombre que consideraba atractivo se levantaba la falda hasta la cintura. Le excitaba pensar que él la estaba mirando.
Yo me tapaba la cara y escondía la cabeza en su hombro para huir de una realidad que no quería aceptar.
Hoy mamá ha muerto.
Me falta su hombro para llorar.
RELATO 9
*El último trago*
Otra vez me llamaron con urgencia por el mismo asunto. Mamá se había escapado de casa mientras su cuidadora dormía y había vuelto al local del polígono. Allí la encontraba siempre abrazada a algún joven pasado de alcohol, con las cejas mal pintadas y el carmin corrido. Al verme sonreía y entonaba:
"Tómate esta botella conmigo
Y en el último trago me besas
Quiero ver a qué sabe tu olvido
Sin poner en mis ojos tus manos..."
Esa canción le escuchó cantar papá en aquel garito de la Habana. Era una niña. No se separó de ella hasta su muerte.
RELATO 10
INFAMIA
Dos agentes del KGB los arrestan a la salida del Bolshói. Separan a madre e hija del marido.
En el cuartel, el instructor ordena a Ekaterina que se suba la falda. Lleva ligas porque le gusta a Aleksei, su marido. Solo lo sabía su amiga Katia. ¡Traidora!
Los agentes miran las piernas con asco: “¡Vieja zorra capitalista!”, dicen.
Le hacen fotos humillantes. La hija se ovilla.
El juez dicta: “Quince años de trabajos forzados para Ekaterina Jodkevich. Diez por connivencia con el espía Aleksei Dmitriev. Cinco por costumbres inmorales y burguesas. La hija, Shasa, cinco años como familiar de condenados”.
RELATO 11
SED LEX
Y aquí estamos.
Las dos, ante el banquillo del ultramontano Ministerio de la Decencia.
Ella, cabizbaja y devorada por la vergüenza, es acusada de desviarse del camino correcto, de vida libertina y pecaminosa.
Así que, en su defensa, vine henchida de argumentos a este miserable juicio.
Porque fue un acto de supervivencia y pagó su condena a la marginalidad.
Porque ya superó el miedo a las miradas inquisitorias y perdió la cuenta de las vejaciones.
Porque los supervivientes no se avergüenzan del camino elegido.
Por dignidad, amor propio y por encima de todo porque ella era yo.
RELATO 12
Siempre juntas. En los conciertos de "Caca de Lux" o de "Kortatu", pegando saltos con el subidón de un chino. Y siempre unidas por el mismo rollo y las mismas historias: tu intento de suicidio, la violación de la Mari, el cabrón del Fran.
Y al río haciendo pellas, con el loro y "Lole y Manuel".
Y nos pasábamos los porros, los novios y las bragas.
Ahora no quiero compartir tu inexistencia. Tu inmovilidad me da miedo y no contestas. Aquí tengo a tu hija, destrozá. Intentaré cuidarla, pero no te prometo ná.
Solo que te quiero.
RELATO 13
8 DE MARZO
Oigo, desde mi ventana, los gritos de un coro contundente: “Yo sí te creo”
Sé que yo también les creo, porque mi cuerpo pudo estar en venta y a nadie le importó destrozar mi alma por placer.
Dejé de ser persona para ser cosa y me fui apagando para poder sopórtalo.
Usada y manipulada, me fui borrando, queriendo desaparecer.
Como cosa que envejece, fui desechada, tirada a la basura.
Aquí está el recuerdo patético de lo que fui, mientras mis ojos aún siguen perdidos en el dolor infinito.
Muerta por dentro, yo si te creo, hermana.
¡Claro que te creo!
RELATO 14
Nerea.....Nerea con el ciego.
Que asco de tia.... Que asco de vida.
-Nerea... Despierta... Oye...despierta.
Pues no sé a quedao dormida la tía guarra.
-¿¿¿Nerea...tas muerto???
Pues ahora me va a comer to el c....
RELATO 15
_DESAMPARADOS_
Hay nombres que hacen que sea difícil remontar desde la cuna a ningún lugar mucho más alto.
_Desamparados_ era el mío, un nombre plural que nunca me gustó y que, además de entenderlo como una venganza de mis padres por el simple hecho de nacer, parecía que incluía a más personas además de a mí... como así fue.
Mi hijo tuvo la mala suerte de formar parte de esa fatal saga, y yo, como si intuyese desde siempre que sería así inexorablemente, no hice nada por ayudarle a eludir un destino que parecía escrito para él en mi maldito nombre.
RELATO 16
Bar “El Purgatorio”
Ahí las veis, mujeres destrozadas por una dura vida de submundos, cuya belleza se quedó en el “Jardín de la Luz” y que ahora no pueden regresar porque ya no son animales exóticos sino excrementos de una sociedad llena de trastornos, que durante años ha vaciado toda su podredumbre en ellas, comportándose como realmente eran, aquellos hipócritas y charlatanes que decidían la vida de sus esposas e hijos y se hacían los importantes.
Se olvidaron de ellas, de su paño de lágrimas y las dejaron tiradas como perros en la calle. Ahí se juntan y arropan, solas, indefensas. Pobres.
RELATO 17🥈
_FRAGILIDAD_
He descansado sobre mi sangre.
He dormido sobre colchones mugrientos y vómitos..., y
he despertado pegada al suelo.
He portado sombreros de detritos.
He sido enculada en las más altas torres de la _Sagrada Familia._
He vendido mi cuerpo para ser atravesada por las agujas del placer, y sentido cómo galopaba la sangre por mis venas.
He vagabundeado con todos los locos de mi tierra.
He tenido la muerte entre mis brazos, y enterrado a un ejército de inocentes.
He caído al vacío y resucitado mil veces.
Sin embargo... Son la soledad y el desamor los que me consumen.
RELATO 18
*T* abernas sombrías, estancias concupiscentes,
*R* efugios testigos de efímeros amores;
*I* lusas doncellas, ruines alcahuetes.
*S* ecular oficio, bálsamo terrenal;
*T* rémulos varones de fervor carnal.
*E* xpertas amantes, atractivas divas,
*S* upieron atenuar múltiples heridas.
*L* ozanas mancebas, vendieron consuelo,
*U* fanas mesalinas, malgastaron el tiempo;
*P* laceres ajenos desgastaron su cuerpo.
*A* venturado camino de almas marchitas,
*N* efasto destino de esperanzas perdidas;
*A* usentes sus mentes, vacías sus miradas.
*R* aídos sus vestidos, ajadas sus facciones,
*E* xhiben su miseria sin sufrir emociones;
*S* ublimes, decadentes, desventuradas mujeres.
RELATO 19
_*Ya no siento nada...*_
Ya no siento nada, estoy perdida, el desgarro que me rompía por dentro ha dejado vacía mis venas.
Mi sangre no alimenta ya el calor de mi cuerpo.
Mi mano desnuda mis muslos y, no siento nada...sólo vacío.
¿ Por qué una pérdida tiene el poder de rompernos?
¿ Qué demonios nublan nuestra mente y nos arroja al abismo de la nada?
Lo he perdido todo y ahora, ni tan siquiera el dolor me acompaña.
Ya no hay nada en mí que vibre con cada latido porque mi alma yace inerte junto a mí.
RELATO 20
ANATOMÍA DE UN LIGUERO
Cuando me compraste en aquella lencería de barrio eras la flor que yo apretaba cada tarde. Tu pasado fue feliz en mi tejido de nylon que ya no desnuda la noche, porque pasan huyendo los amantes.
Tu mirada, llena de tristeza, como niebla que enturbia tu presente. No puedes luchar, perdida en tu memoria, aunque estés aquí, estás ausente, impregnándome de húmedo orín, olor perenne.
Una mañana de lluvia, la desesperación posó a tu lado, cabizbaja, apoyando la cabeza entre sus manos, pero tú no la veías... ¿No sientes?
El tiempo convierte los besos en penumbra, desesperanza incierta, presente
olvidado.
RELATO 21
- No llores. Te saldrán ojeras y parecerá enferma, si estás preocupada todo saldrá mal.
Nuestra edad no importa, hay muchos hombres mayores que no reparan en las jóvenes, les da vergüenza, pudor, solo las miran. Los soldados vienen del frente más sucios que nosotras.
Ríete fuerte, a carcajadas, parecerás contenta y llamarás su atención y eso sí, lávate muy bien la cara, con agua fría y jabón y sonríe siempre para que se mantenga estirada. Yo te pintaré, no te preocupes.
¿No quieres que te pinte yo? No llores, anda, no llores.
RELATO 22
Me parte el alma ver a mi sobrina así, pero no hay nada que pueda hacer. Sí, las prostitutas también tenemos alma y sentimientos.
Le advertí que en este mundo no existe el amor. Es imposible. La vida no es como en las películas de Hollywood, nadie va a venir a salvarnos. Nadie.
Cada lágrima que derrama es una puñalada en mi corazón. Noto como la locura empieza a adueñarse de ella, tal y como hizo en su día conmigo. Este infierno acabará; tan sólo espero que no sea demasiado tarde para ella…
RELATO 23❇️
MAMÁ, ME DUELE
Me duele ver cómo te levantas la falda con gesto de autómata. No sabes que ya nadie vendrá a ofrecerte una copa para después comprar tu calor, tu suavidad y tu dulzura por cuatro perras.
Me duele desde que tengo uso de razón y te veía marchar con la cara cargada de pintura, gran escote que lucía sin compasión tus huesudas clavículas y unos tacones desportillados.
Me partía el corazón verte llegar con algún moratón que intentabas ocultar y tener que disimular que lo había visto para no añadirte sufrimiento.
Ya no es necesario.
Mamá, recuerda.
Ya no.
RELATO 24
*La chica de las mil poesias.*
Meretriz de lujo.
Nos conocimos siendo jóvenes.
El amor vivía en tus venas, llevabas el arte tatuado en tu cuerpo y la poesía impregnada en tu piel.
Resplandecías sin necesidad de luz.
Eras magia.
Perteneciste a los placeres prohibidos del mundo, que giraban a tu alrededor, eras el pecado más puro.
Nadie igualaba tu belleza, sensualidad, irradiabas felicidad.
Sentada desde lo alto de tu trono, ganaste el amor de muchos, eras la perfección que todas quisieron alcanzar.
Y pasaron los años, la decadencia, el olvido.
Yo fui tu único amor, te prometo, seré tuyo en nuestro pequeño pedazo de eternidad.
RELATO 25❇️
Última asignatura
A Nati se le cayó el mundo encima cuando vio aquel 4'3 en el tablón de la universidad. Álgebra era su última asignatura y el sueño de ser ingeniera se alejaba. No tenía beca y andaba corta de pesetas para pagar unas nuevas tasas.
Cuando llegó a casa, su madre sacó su característico coraje para tranquilizarla. Se acicaló y volvió a echarse a la calle como tantas veces había hecho por su hija. Esta vez al rector solo le cobraría siete décimas.
RELATO 26
_DE BARRO Y NIEBLA_
Mi compañero no puede dormir ni estando absolutamente ebrio, pero a mi lado al menos se tranquiliza ¿sabe?....
...¿Qué le estaba contando?...ah sí.... Los viernes, después del trabajo, nos disfrazábamos de mujer y nos poníamos hasta arriba de alcohol, de tíos.....de todo.
Yo creo que estábamos tan vacíos que intentábamos llenarnos con cualquier cosa, desesperadamente....
Mi compañero se enamoró de aquel chulángano y lo dejó todo por él...
El pobrecito ya no es capaz de pensar ¿Sabe?
Yo sí....
Y pienso que estoy metido en un camino de barro y niebla, del que, francamente, no sé cómo salir.
RELATO 27
*Desvaríos*
Tía Marisa no lo sabía, pero aquella sería la última noche.
Me comprometí a sacarla a bailar el sábado y estaba segura de que eso sí lo recordaría.
Cuando la recogí llevaba medias negras, bufanda a cuadros, minifalda azul... La noche prometía.
Perdí la cuenta de los Gin tonic. Ella estaba loca de felicidad, literalmente, y se encargó de que todos lo supieran.
Me derrumbé definitivamente con su último show mientras nos amanecía en la cafetería.
Cuando la resaca dejó de acosarme, pensé si podríamos posponer lo de su ingreso. En realidad, sus desvaríos no hacían daño a nadie.
RELATO 28
Prejuicios
Mi abuela adolescente revista en mano,
viendo una minifalda
acortó todos sus vestidos.
En un pueblecito de dos mil habitantes, fue la
comidilla de las mujeres;
su amiga la mojigata le
dejó de hablar.
Con el tiempo se vino con
el abuelo a la capital.
A medida que los prejuicios disminuían, mi
abuela alargaba sus
faldas.
Un día la llevé a la feria.
Unos policías no dejaban
subir al escenario a
una anciana.
Una señora nos comentó:
— Pobrecilla, ella todo
lo criticaba, después de
vieja, se le ha dado por
enseñar las piernas.
Mi abuela exclamó:
— ¡La mojigata!
RELATO 29
OTROS TIEMPOS
Los dos eran contables.
Andreu trabajaba en un pequeño comercio de El Raval y por las noches sacaba algo más en un club travistiéndose.
Borja tenía su propio despacho en una compañía internacional en Londres.
En Navidades Borja volvió al Paseo de Gracia para visitar a su familia y ver a sus amigos, con los que salió de copas y algo más.
Al amanecer en el cuartelillo y ver a su compañero de celda, Borja sintió cómo todo su mundo daba un giro de ciento ochenta grados.
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