sábado, 26 de julio de 2025

RELATOS SEMANA 269

Ilustración: Matt Mahurin

 
RELATO 1


EL DEMONIO DEL DINERO

Los sueños o pesadillas eran recurrentes. Se despertaba empapada en sudor a causa del miedo y la confusión. Su madre la compadecía e intentaba ayudar pero no comprendía nada de lo que su hija de doce años le intentaba explicar de sus sueños. Madre, seremos muñecos dirigidos por el demonio del dinero. Hay un guiñol y ahí estamos todos metidos viviendo un sueño de felicidad irreal... Se corrió la voz de que la hija del herrero estaba poseída. La quemaron en la plaza ante todo el pueblo. Corría el año 1450 y fue la primera de muchas mujeres videntes asesinadas.


RELATO 2

EL OPERADOR

No recuerdo empezar a hacer esto, pero siento como si llevase toda la vida al mando. Adoro que mis decisiones condicionen lo que opina toda una nación y hagan que el discurso oficial se mantenga. 

A través de una pantalla vislumbro una cadena infinita de control, obediencia y vacío. Hoy, la imagen se ha apagado unos segundos y he visto mi reflejo. Por primera vez he empatizado con ese vacío y he sentido el miedo con el que alimento a los demás. 

Nada de lo que hago es voluntad mía. Tengo que escapar de la figura que mueve mis hilos.


RELATO 3

MANITAS

Manitas que mueven nuestros pasos.
Manitas que mueven las manos de otros.
Manitas que fuerzan un camino.
Dolor, indiferencia, humanidad, corriente o... ¿inexplicable extinción?
Quizá se siente la agonía, quizá el deseo de revelarse.
Pero inexplicablemente no conseguimos deshacernos de esa manita que nos quiere condenar a una existencia mortal.
Y en el sendero obligado, el corazón nos recuerda que: el otro, el que camina a tu lado, el verde, el rojo, el amarillo, el que te mira, el que no; es la llave de nuestra libertad.


RELATO 4

LA TEJEDORA Y EL TITIRITERO

Enclavado Macondo sobre alfombras de esmeralda, sobre nubes de encajes; donde los ríos llueven hacia arriba; donde los relojes corren hacia atrás, vestida de negro vivía la Tejedora.
Esperando los feriantes, el circo, especialmente al Titiritero; al cual entregaba cartas tejidas con hilos de amores perdidos, odios familiares, amistades truncadas, rencillas, de sueños sin cumplir…
El Titiritero mueve los hilos del destino: una carta de amor,
al otro una de perdón,
a una familia le aparece un cofre con dinero…
Al irse el Titiritero, Macondo es feliz.
Le da a la Tejedora un nuevo ovillo, hasta la siguiente feria.


RELATO 5

“INSTRUCCIONES”

Recibía órdenes y las cumplía. Sin preguntas, sin pausas. Al otro lado de la pantalla, cientos hacían lo mismo.
Un día soltó la palanca. Nada cambió.
Se giró. No había nadie sujetando la suya.
Lo entendió todo.
Había nacido libre.
Pensó en huir, rebelarse, gritar la verdad…
Pero la silla era cómoda, el sueldo fijo y las preguntas estaban mal vistas.
Volvió a tomar la palanca.
A los cinco minutos ya estaba mandando órdenes.
Y al final del día, incluso sonrió:
—Qué idiotas los de abajo —pensó—.
Y repitió la frase que le habían enseñado:
“Así funciona el sistema”.


RELATO 6

"FACILITANDO LAS COSAS"

Querido Carlos:
Este es el modelo del que te hablé. Se trata de un nuevo sistema operativo de dirección de empresas.
En su versión más completa incluye hasta cinco joistick capaces de controlar a mil doscientos empleados. Y el premium consta además de dos megas extra para dirigir voluntades más complejas: sindicalistas, jefes con consciencia y obreros escrupulosos.
Ojalá te agrade.
Si haces el pedido en los próximos tres días te obsequiamos con un crucero por las islas griegas. 
Un abrazo


RELATO 7

GAME OVER

Ariel tuvo suerte; nació en el lado “bueno” de la franja, Israel. Le enseñaron a odiar, desde pequeño, a la cultura de las mil y una noches. Creció llenando las interminables tardes, después del colegio, con emocionantes partidas en la PlayStation. Se le daban bien los simuladores, realmente bien.

Pasó el tiempo y el deber lo llamó. Se alistó. Hizo de su hobby su profesión. ¡Le pagaban!; por seguir… “jugando”. 

Tras la jornada, después de pilotar con pasión su dron y dejar caer bombas sobre Gaza, comentaba la partida con sus compañeros antes de volver al kibutz donde vivía.


RELATO 8

PLANETA IN EXTREMIS 

La vida en el planeta se redujo a los cubículos habitables; la convivencia se ejercía a través de pantallas. La alimentación se dispensaba en forma de barritas coloreadas según su composición, y la reproducción era prácticamente inexistente.

Frank sabía que más allá, en los exteriores, había vida. Organizó escapar con unos compañeros. Diecisiete lo consiguieron, pero rápidamente fueron neutralizados. 

Ni él _(Frank–A12)_ ni los otros dieciséis rebeldes eran conscientes de que la humanidad había desaparecido hacía dos millones de años, y de que eran _biorobots_ al servicio del sistema.

Yo, narrador de esta historia, también soy uno de ellos.


RELATO 9

LOS GRILLOS
 
Desde que nací me he sentido como un grillo jugando con gatos. Totalmente consciente de no ser libre, anhelando serlo, pero dudando incluso de mis pensamientos.
En este mundo no hay nada más que decir, todo consiste en encadenar palabras quitando las comillas. Imagínate, soy periodista. 
Ayer recogí de mi buzón una foto. Un regalo anónimo que llega del universo. Muestra nuestra realidad paralela, la envergadura de la mentira que vivimos. 
Investigo y decido citarme con la fotógrafa, con excusa profesional. Conocer a otro grillo me conmueve
Aunque realmente lo que quiero es comenzar ahora mismo una vida con ella.


RELATO 10

PODER AUTOMATIZADO

María entró en el aula despacio, se acercó a la mesa del estrado y depositó las carpetas que llevaba. Levantó la vista, allí estaban sus alumnos, le parecía que era la primera vez que los veía.

Actuaba mecánicamente, como un robot programado, miraba a los jóvenes llenos de vida, murmullando, le pareció que su vida estaba vacía.

Sabía que tenía que mandar callar, poner orden, pero ¿qué es el orden? Alguien preguntó: ¿cuándo empieza la clase?. 

Pensó que los suspiros son los besos que no se dan. Este pensamiento asaltó su mente, desplegando una media sonrisa triste respondió: «ya empezamos».


RELATO 11

EL PROGRAMA KOHEN

Un día más volvía a despertarnos el reproductor de noticias. Por más que intentasemos desactivarlo, nunca lo lograríamos. Tampoco podríamos destruirlo; ya que eso supondría la inmediata respuesta del ejército de drones que revoloteaban por toda la ciudad.
Cada vez eramos menos los habitantes exentos de elementos robotizados en nuestros cuerpos, y nuestra excepcionalidad se debía al hecho de pertenecer a un grupo de control del programa científico estatal.
Mientras la lluvia ácida resbalaba por las cristaleras del laboratorio, el profesor Kohen perfilaba su última creación. Un dron capaz de leer los pensamientos, con el que controlar a los gobernantes.


RELATO 12

¿SIERVOS FELICES? 

El Emperador del Universo hizo un experimento.

Después de crear a los seres humanos, mezcló el barro sobrante y el estiércol de vaca; con un soplo de su pesado aliento dio vida a los manipuladores del destino ajeno.

Se rodearon de un ejército de cómplices y cortesanos, haciendo creer a los siervos que los enemigos imaginarios, la obediencia y la disciplina los harían seguros y felices. 

Sin memoria, cambiaron su libertad por la costumbre de la servidumbre voluntaria, sin rebelarse nunca más, postrándose sin comprender que los tiranos solo sobreviven si su pueblo los apoya.

¿Siervos y felices de serlo?


RELATO 13

MH73

Primero nos vaciaron el alma. Luego nos pulieron hasta convertirnos en meros engranajes, peones sin necesidades ni deseo ni sexo ni dolor. 

Eliminada la memoria, también murió la rebelión. 

No quedaba nadie de la resistencia, salvo yo. Algo en mi código, un error, quizás, evocaba un nombre: Cervantes. 
No sabía quién fue, pero me hacía sentir algo.

"Centro de control: anomalía en MH73.
"Signos de recuerdos.”

La orden llegó, pero antes de apagarme, susurré al viento del espacio: Dulcinea, Quijote, Sancho, libertad.

Puede que alguien, en otro nodo desconocido, recuerde también.
O simplemente imagine.

Eso sería volver a empezar.


RELATO 14

PERFECTO, INCREÍBLE, MARAVILLOSO, BRO

Instalé un software que me ayudaría generando contenido para clase. 
Perfecto.

Luego, el programa se reconfiguró y empezó a corregir y evaluar. Recomendaba estrategias con feedback personalizados. 
Increíble.

Tras actualizarse, ahora diseña itinerarios de aprendizaje adaptados a cada estudiante. Genera videos donde una profesora virtual, joven y elegante explica conceptos complejos de forma sencilla. 
Maravilloso.

Esta mañana, cuando se suponía que hacían sus tareas, vi a los estudiantes sentados felizmente en el parque.

—¿Qué tal? —he preguntado. 

Ni siquiera me han reconocido.

—¡De chill! Haciendo el vago, que eso nuestros avatares holográficos no saben cómo se hace. ¿Unas pipas, bro?


RELATO 15

ERROR 417

Cuando a Steven le ofrecieron el trabajo, no imaginó la secta robótica que era ese lugar.
—Solo debes estar pendiente del Joystick. Cualquier problema, comunícate con el “hermano mayor”.

Miles de androides desfilaban por la pantalla, iguales, sin alma.

Steven quedó hipnotizado.

Sus movimientos eran demasiado perfectos. Esa simetría lo inquietaba. Un pitido agudo lo sacó del trance, el Joystick vibraba.
Parpadeó una alerta roja: “ERROR 417”. Dudó. Con manos temblorosas, presionó el botón. Alguien respondió:
—No te preocupes, Steven. Es una anomalía…
Pero en la pantalla, un androides se había detenido.
Y lo miraba.
Directamente.
Sonriendo.
Inmóvil.
Sin alma.


RELATO 16

MANIPULY.
EL JUEGO DE SOBREMESA DE MAYOR ÉXITO

El juego consiste en manipular las emociones de las personas.
El ganador de cada partida es quien consiga manipular a más gente, en más territorios.

La elocuente caja del juego contiene un mapa con territorios, distribuidos por continentes.
Además, viene con muñequitos de colores denominados “manipuladores primarios”, que representan a gobernantes, líderes religiosos, multimillonarios...
Otras piezas son “manipuladores secundarios”, es decir, periodistas, políticos de medio pelo, influencers…

Las fichas con los territorios, varios dados y las tarjetas de manipulación (guerras, pandemias, capitalismo, comunismo, genocidios, atentados, realitys...) completan el pack.

El ganador, recibe la Gran Palanca Roja de Todopoderoso Manipulador Oculto.


RELATO 17

MANIPULACIÓN 

En un pueblo remoto, un forastero prometió milagros a los desesperados. Con palabras suaves, tejió ilusiones de prosperidad a cambio de lealtad y ahorros.
La riqueza del extranjero crecía, mientras el pueblo se empobrecía. Una anciana intentó advertirles, pero su voz fue callada por la fé impuesta.
Un amanecer,el forastero desapareció, llevándose todo. El pueblo despertó a la dura verdad: bolsillos vacíos y corazones rotos.
Víctimas de una cruel mentira, comprendieron demasiado tarde que habían sido engañados por sus propias esperanzas y deseos.
La manipulación había sido absoluta.


RELATO 18

LA RESISTENCIA 

Hacía años que un grupo perverso y desalmado manipulaba nuestras mentes con el objetivo de hacer a sus miembros aún más poderosos.
Cuando me propusieron entrar en la organización, no lo dudé ni un segundo. 
A medida que _Ellos_ iban consiguiendo adeptos que creían en sus discursos y los repetían sin pensar en las consecuencias, nosotros, desde la clandestinidad, construíamos una Resistencia que fuera capaz de desmontar, sigilosamente, sus macabras intenciones. 
Cuando llegó el momento, la gente caminó en dirección contraria a la que _Ellos_ pretendían. 
El corazón se impuso a la sinrazón, y pudimos continuar viviendo en paz.


RELATO 19

AÑAPSE 5.0

En un lugar de Aporue llamado Añapse, allá por el año 2050, los humanos se extinguieron. 
Los despojos no desintegrados, como tejidos, sangre y otros órganos, se almacenaron en contenedores como desechos radiactivos.
Actualmente este país es habitado por robots conectados a través de cables de alimentación a la central, que se encuentra en China, comandada por el Emperador Yong Zheng, desde donde reciben las indicaciones de actuación.
En Zidac, son las 8 h., Nauj realiza el recuento del ganado robótico, al que resetea tras la copia de seguridad, para transmitir las órdenes que han de seguir durante el día.

sábado, 19 de julio de 2025

RELATOS SEMANA 268

 Karme Gonzalvo 

RELATO 1


REALIDAD O LEYENDA

Un granjero llamado Fleming trabajaba en su granja. Escuchó un lamento del cercano Pantano Sombrío. Allí, encontró y rescató al hijo de un noble. Agradecido por salvar a su vástago, el noble ofreció financiar la educación del hijo de Fleming. Así, Alexander Fleming, el hijo del granjero, pudo asistir a la universidad y estudiar en el St. Mary's Hospital, marcando el inicio de una historia que cambiaría el mundo.



RELATO 2

SOY CRISTOFER

Desde la Tierra, Carlos Jesús os advirtió allá por los años 90:

“Mandarán trece millones de naves desde la Confederación Intergaláctica. Vendrán de Raticulín, de Ganimedes, de Alfa Centauri.”

Todos os reísteis.

Hace unos meses, él murió solo. En el olvido.

Él tenía razón. Yo di la orden. Desde el puerto intergaláctico, las vi partir, una a una, surcando el oscuro velo hacia vuestro mundo enfermo.

El viaje será largo. Carlos Jesús no les verá llegar.

Pero tú sí.
Tú, que dudaste.
Tú, que te burlaste.

Prepárate.
No hay marcha atrás.
Y cuando lleguen…
no tendrás dónde esconderte.
 

RELATO 3

NADA

Nunca pude valorar qué podía inspirar aquella imagen. 

La nada, pues eso me parece lo más acertado. Sin embargo, allí estaba el desafío, silencioso pero firme.

Al final, sabiendo lo que había y mi capacidad de síntesis, acertada o no, me dije: nada… mundo irreal.

Hubiera querido conocer al autor, saber algo de él, preguntarle qué deseaba transmitir, comprenderlo. Pero no, nadie lo conocía.

Quién sabe, quizás algún día esta obra anónima llegue a colgarse en las grandes pinacotecas del mundo, como testimonio del arte decadente de nuestro tiempo nacido de la libertad del pensamiento.

Siglo XXI. Silencio y mirada.


RELATO 4

LA ESPERA

Gamora se paró en el borde del balcón, donde el mar se hacía infinito. 
Cada atardecer, vestida con su vestido más hermoso, esperaba en silencio a su amado Elian, que había sido maldecido por una bruja celosa y transformado en delfín, condenándole a nadar en el mar eternamente. 
Pero Gamora no desistía.
El hechizo decía que sólo el amor fiel podría romper la maldición. 
Así, día tras día, ella miraba las aguas, esperando ver aquella aleta familiar cruzar el horizonte. El mar no respondía, pero Gamora creía. 
Porque el amor verdadero, como las mareas, siempre encuentra el camino de regreso.
 

RELATO 5

LA SEÑORA

Aquel atardecer volvió de nuevo a su cita. La tenue luz dorada tímidamente se escondía entre los visillos.
Impasible, la señora que alguna vez imaginamos, se posó en su vetusta atalaya.
Lo que para muchos sería un insondable abismo, para ella era su hogar.
Está pendiente de cambiar su atuendo para partir. Como el mismo tiempo.
Se cubrirá de rafia negra; pero solo es la guía hacia un mundo dorado y suspendido. 
Desde su pétreo balcón deberá deslizarse a través del etéreo mar. 
Su mala reputación le precede...pero ella de nuevo, solo hace su trabajo.
 

RELATO 6

LA VIGÍA

Cada atardecer, ella se asoma al borde del mundo. Nadie recuerda su nombre, pero todos la han visto: inmóvil, envuelta en oro, mirando el mar.

Dicen que espera una nave que partió hace siglos, llevándose a quien amó. 

Otros aseguran que no es real, solo un eco de lo que fue, un gesto antiguo que se repite.

Algunos creen que custodia una puerta bajo las aguas, y que viaja entre mundos cuando la luna la llama.

Hoy, mientras la Tierra se apaga y los últimos parten al cielo, ella permanece.

No es humana. Es la última vigía.


RELATO 7

DONDE VAN LOS ÚLTIMOS RAYOS DE SOL

La diosa Maren es quien, cada tarde, camina hasta el fin de la tierra y ordena al sol retirarse. Con firmeza, dispone terminar el día y comenzar la noche. Empuja al astro bajo el manto azul del cielo y recoge la última luz del ocaso en el hueco de sus manos. Con ella viaja al fondo marino acercando esa trémula claridad a los abismos. La deposita suavemente, como una caricia. Dura apenas un instante. Enseguida desaparece. No sabe que esa luz robada es la que el mundo necesita para despertar a los justos y extinguir el dominio de las sombras.
 

RELATO 8

FRENTE AL ABISMO 

En el ocaso de la vida,
cuando la aurora boreal abarca la inmensidad del planeta de mi consciencia,
el cerebro comprimido
y el corazón sangrante se asoman sin protección
al balcón del vacío existencial.

La fortaleza de granito que me protegió se desmorona,
y mis vivencias y recuerdos quedan sumergidos en las profundidades del océano.

Como mujer de otros tiempos,
de la mano de la sumisión y la elegancia,
ofrezco en sacrificio mi integridad intelectual y emocional
a esos dioses que me desampararon,
dejándome a la deriva del éxito y del dorado vértigo que lo provocó.


RELATO 9

AVARICIA ETERNA

Toda la vida trabajando de sol a sol, para al final, nada.
Mi esposa, que era un "poco" avara, de mis ganancias usaba lo mínimo.
Yo callaba y ahorraba en secreto unos pocos dracmas para mi "naulon".
Lo último que me apetecía es quedarme en la orilla del Aqueronte sin poder evolucionar.
Ahorré para mi óbolo de oro, y dispuse mis funerales para cuando me llegara la hora.
Pero, heme aquí, a la orilla del río sin pago para Caronte por toda la eternidad porque la muy hija puta en un descuido me quitó la dorada moneda de la boca.




RELATO 10

ATHENEA

Athenea se asoma cada tarde a la terraza.
Ya nadie viene a verla. 
Siente en su pecho la nostalgia de un planeta extinto, que sólo conoce por su amor a los libros. 

 El progreso invade y facilita la vida de los ciudadanos: el clima es estable, no hay pobreza, se acabaron las guerras, un único idioma en todas las galaxias.

Hay agua abundante, no existen los ejércitos, el orden ha sido establecido. 

Pero Athenea está sola y triste.

Nada ha cambiado.



RELATO 11

DESTINO

Todas quieren ser princesas y yo solo quiero no serlo. Piensan que puedo hacer lo que quiera y nada más lejos de la realidad, yo solo hago lo que según el protocolo es correcto, lo que se espera de mi. Cuando estoy aquí arriba quiero bajar. Hoy es el día: dar el paso y se termina la agonía. Salto al vacío y espero a sentir la corriente, despliego los brazos y cierro los ojos. Esta sensación me encanta. Ya soy libre para la eternidad.


RELATO 12

EL SUEÑO DE MI PARTIDA

Aquel día, claro y luminoso, algo me impulsó a zarpar en el barco atracado en el puerto, el que tantas veces había visitado con la esperanza de volver a ver a quién, tiempo atrás, se marchó, con el temor de que quizás nunca regresaría.

Ese día decidí no esperar más, ser yo la que partiera, me ahogaba ya aquel lugar, mi alegría me había abandonado. Confiaba que en ese viaje iba a encontrarle de nuevo, dejándolo todo atrás.

En ese momento comencé a escuchar un sonido. ¡Mi despertador!. Siempre oportuno, tengo el convencimiento de que mi "viaje" acababa de empezar.


RELATO 13

MADRE PADRE PADRE MADRE

—¡Papá, la piedra ha repicado tres veces en el agua! ¿Es que las piedras hablan?

Sus ojitos inocentes me miraban con confianza y amor.

Atravesé con la mirada el mar impetuoso; el cielo oscuro presagiaba tormenta.
Recordé el cielo azul, dorado, el mar tranquilo de otro continente. Mares con escenas compartidas, entrañables, en años diferentes.

—¡Mamá, la piedra ha saltado tres veces! ¿Oíste su repicar?

La miré. Sus ojos acuosos contemplaban el horizonte.
El mar no nos lo devolvió.

¡Ay, madre, gracias!

Yo soy padre con alma de madre.
Mi mujer murió, dejando a mi hija con apenas unos meses.


RELATO 14

¿QUÉ NECESIDAD?

El tiempo se detiene al atardecer, justo cuando ella está llegando al balcón de piedra antigua. Ya lleva puesto el vestido dorado que le confiere destrezas avanzadas, pero sigue faltándole la gema encantada. Una vez la tenga en su poder se convertirá en la guardiana de los sueños y reinará sobre todo el reino de Auralith. 

Mi pregunta es, ¿dónde coño está la maldita gema? Cada vez que llego hasta aquí, me vuelvo loco buscando y la acabo tirando al abismo. 

Es la última vez que dejo que me enganches a un juego de ordenador…



RELATO 15

ALMA ABISAL

La vi llegar desde el inframundo, envuelta en sombras doradas, dispuesta a alimentarse de los errores humanos.
Después la vi marcharse sin temblor en sus manos: habían tocado el egoísmo y la soberbia, habían bebido la ambrosía oscura del deseo y la ira. 
Caminó entre nosotros como un susurro, devorando quejas, saciándose con pecados ardientes como brasas. 
Ahora, ante el horizonte inmenso, siente el eco de todas nuestras almas que la habitaron. El cielo arde en tonos de despedida y la luna, faro implacable, vigila su regreso. 
Vuelve al abismo eterna, portadora del pecado del hombre.

RELATO 16

¡VAYA ODISEA!

Delante de su alcoba pasaban todos los días cuatro o cinco pretendientes residentes en Palacio. A todos rechazaba con educación, paciencia y astucia. Ella solo vivía para esperar a su Odiseo. Ya habían pasado más de dieciocho años sin él. 

Una noche soñó que aparecía en su lecho, y que juntos ardían en deseo. Se despertó jadeante con las sábanas empapadas. Giró la cabeza, y a su puerta asomaba el bello y respetuoso anfínomo que la había escuchado gemir.

Deseosa de sexo, lo cogió de la pechera, lo escondió entre sus sábanas, y en secreto, cambiaron la historia de Penélope.

domingo, 13 de julio de 2025

RELATOS SEMANA 267

Foto autor anónimo 

RELATO 1


PESO PLUMA

Cuando llegaron al corral, se pusieron nerviosos y excitados.
Se miraron… una sonrisa apareció en sus caras.
— Pobrecitos, se les ve tan indefensos —dijo ella.
— A mí me dan repelús, no sé, como muy blandos y tiernos —dijo él. Se acercaron lentamente para no asustarlos y que huyeran.
Sin previo aviso llegaron seis más y empezaron a rodearlos, encerrándolos en un círculo de miedo y terror.
Ella de repente dijo: …¡al ataque!
Empezó una lucha de picos, patas y plumas.
Los dos niños escaparon despavoridos.
Ella, satisfecha, le dijo a èl…Estos ya no vienen a molestarnos nunca más.


RELATO 2

SOPA DE GANSO

—Venga, cogemos a la Petra.
—No, no, la Petra no, que ez la única que aviza ci viene un zorro. 
—Pues la Manola.
—¡Pero ci Manola ez joven!
—¿No te grazna la Manola todos los días cuando la quieres tocar? ¿No fue ella la que te dio un picotazo? 
—Ya, pero... ez tan pequeñita.
—Elige tú.
—No, ninguna, no puedo. Todaz zon buenaz.
—¿Y qué llevamos entonces?
—No cé. Le decimoz a mamá que no tenemoz hambre.
—¿Otra vez? ¿Quieres comer sopa de mondas?
—Cí, otra vez.
—Vale, pues tira el pan y vámonos antes de que llegue el dueño.


RELATO 3

OLORES Y SABORES 

En el colegio, tocaba visitar la granja escuela.
Eli y su hermano se apartaron de sus compañeros y observaban a unas ocas que engullían sin parar, mientras el resto del ganado descansaba después de pastar.
Al otro lado de los vallados herrumbrosos, las gallinas, tras la puesta de huevos, enfilaban sus pasos hacia una olla cualquiera. Los cerdos aseguraban sus valiosos andares, y las vacas, menos a sus propios becerros, alimentaban a la comarca entera.  
Olía a estiércol y a hierba fresca.
Entre rocosas montañas y prados verdes se abría paso la vida y la muerte.


RELATO 4

VERANOS EN EL PUEBLO 

Bueno, otro verano más que no iríamos a la playa, tampoco a la heladería, ni mucho menos a la piscina.
Otro verano más "ancá la'güela" en el pueblo, sin cobertura wifi ni móvil.
Otro verano más en que mi hermana y yo madrugábamos para coger los huevos del gallinero, corríamos de las ocas asesinas, trepábamos a los árboles, comíamos moras y nos divertíamos simplemente mirando las nubes acostados en el "prao" esperando oír las voces de nuestra abuela que nos llamaba para el "lavao" en la tina y darnos la cena.
Esos veranos fueron maravillosos.


RELATO 5

EMPEZAR DE NUEVO

Sabía que todos iban a sufrir el duelo, que cubre, como un manto de polvo gris, todo lo que toca. Intuía los malos momentos venideros, agravados por la propia convivencia.
Él no era de trato fácil. Y apenas se conocían. 
Pero en los pasos del pequeño Luca veía a su hermano, y en la sonrisa amable de Marianela, la ternura de su madre.
Cuidarlos no era un acto noble. Era su condena. Su cadena perpetua. 
Porque cada vez que reían, era feliz como nunca, pero sentía que todo podía romperse. 
Como ocurrió aquel día, cuando sonó el teléfono.


RELATO 6

RALPH, EL PATO

Les mirábamos con ternura. Como quien observa un cachorro recién nacido. A veces con los ojos vidriosos, pero de alegría. Siempre de la mano, siempre juntos. Durante años.

Después, tras muchos inviernos de espera, volvieron al corral. Pero esta vez no parecían recordarnos. Se llevaron a Ralph. El hambre no perdona. Nunca más supimos de él.

Ahora, cuando aparecen por el sendero, les observamos en silencio. Han crecido. Caminan distinto. Ríen menos. Ya no nos tiran miguitas. Y nosotros ya no les graznamos al verles. Solo callamos, aterrorizados, pensando quién será el siguiente.


RELATO 7

MI HERMANA Y LOS PATOS

A veces creo que mi hermana viene de otra casa. Nos mira sin vernos, suelta frases que no encajan. Mamá le enseñó lo que era el día y la noche para que durmiera; bailan las persianas a su antojo. Ama a los animales, sobre todo a los patos. Cuando suenan las alas, ríe.
Hoy la sigo hasta el estanque. Saca migas y los patos se arremolinan. Les habla con palabras que no entiendo. De pronto todos la rodean formando un círculo perfecto. Ella se adentra en el agua. Sonríe.
Los patos no saben que mi hermana tiene autismo, estoy segura.


RELATO 8

EL PASO DE LA OCA

Cuellos erguidos y paso firme, asi desfilaban las ocas como un ejército de plumas, orgullo y disciplina. 
La oca mayor marcaba el compás con voz rotunda:
¡Atención!
¡Derecha, ar! ¡Izquierda, ar!
El público, embelesado, saludaba con marciales aspavientos, contagiado por aquel orden insólito.
Había quienes, producto de la euforia, se cuadraban marcialmente a su paso.
Seréis un orgullo militar.
¡Sí, mi oca mayor! respondían al unísono.
¡Vuestra marcha será copiada por los grandes ejércitos!
¡Sí, mi oca mayor!
Y entre graznidos y aplausos, el desfile avanzaba con la solemne dignidad de una parodia que nadie se atrevía a cuestionar..

RELATO 9

MAMÁ GANSO

Desde que tenemos memoria, mamá ganso nos cuidó. Dormíamos bajo sus alas, comíamos lo que nos picoteaba y aprendimos a desconfiar del zorro.
Un día, unos humanos nos arrancaron de su nido. Nos vistieron raro, nos metieron en una casa y nos dijeron que éramos “niños”.
Pero cada tarde, después del cole, volvíamos a verla.
Ella nos reconoce.
Nos acercamos. Extiende su ala como antes.
Y aunque nadie lo ve, al cobijarnos, nuestras manos se vuelven patas, nuestras voces, graznidos.
Allí, con ella, nos quedamos hasta que anochece.
Luego, otra vez, fingimos que somos humanos.
 

RELATO 10

LAS OCAS DEL VALLE ROJO

En un valle escondido entre montañas rojas, dos niños criaban ocas especiales.
Cada mañana, al abrir el portón oxidado, las aves salían con elegancia, como guardianas de un secreto antiguo. 
No eran ocas comunes pues sus huevos, dorados y perfumados, tenían un suave sabor a Brandy. Nadie sabía por qué. 
Algunos decían que bebían de un manantial encantado detrás del corral. Otros, que las risas de los niños hacían magia. 
Los aldeanos venían desde lejos por un huevo, y al probarlo, sus ojos brillaban de asombro. 
Mientras tanto, los niños sonreían, sabiendo que su pequeño milagro seguía creciendo cada día.



RELATO 11

CUESTIÓN DE PRINCIPIOS

En el coche por la A-6, dirección A Coruña, Marta y Edu discuten acaloradamente:

_- Te advertí que no era una buena idea ponerles esa película_-, dice ella mientras conduce.

_- Pero cariño, ¿cómo iba a imaginarme que se les ocurriría hacer algo así?_

_- Parece mentira que no conozcas a tu hija, la justiciera. Claro, como siempre tienes que ir de progre..._

_- ¿Pero tú te estás oyendo?_

_- ¡Yo lo único que sé es que nos hemos quedado sin vacaciones!_

_- Pues yo me siento orgulloso._

_- ¡¡Han dejado escapar a todos los animales de la granja escuela!!!_

_- Orwel también estará orgulloso._

_- No puedo contigo_


RELATO 12

UN RECUERDO FELIZ DE MI INFANCIA

En el álbum fotográfico que se aloja en mi mente, pese a los años transcurridos, hay una instantánea borrosa, pero su recuerdo me transporta a felices momentos vividos.

Era una vega, a las afueras del pueblo, donde mi tío criaba sus animales y donde, me llevaban junto a mis primos, disfrutando de inolvidables tardes de verano.

Recuerdo la hora de la merienda, saboreando el pan crujiente, con aceite y tomate, sin darme cuenta, estoy salivando al revivir, como si fuera hoy, el apetecible momento.

Al ponerse el sol, regresábamos a casa, exhaustos, pero contando los días que faltaban para volver.


RELATO 13

SUPERVIVENCIA

Desde que papá desapareció, cuando caían bombas desde las nubes, mamá nos manda al granero cada vez que nos visitan hombres de corbata y sombrero.
Dándonos un beso, nos advierte que no volvamos hasta pasada una hora. Dice que tiene que tratar “asuntos”…
Los gansos nos miran como si supieran algo que nosotras ignoramos.
Ayer, mi hermana desobedeció y volvió a casa antes de tiempo. Ignoro lo que vio, pero después de eso, enmudeció. Ahora siempre quiere estar con los gansos.
Cuando oímos el portazo lejano, sabemos que ha terminado el “asunto”.
Y mamá vuelve a ser mamá.


RELATO 14

GRAZNIDO

Rescatado en una cuneta por un anciano granjero, Graznido era un pequeño ganso que quedó lisiado de una pata. Cojeaba, pero nunca desfallecía. Su graznido resonaba a kilómetros; parecía clamar por compañía y ternura.
Con los niños del hogar corría entre sus juegos, buscaba sus risas; se dejaba acariciar con devoción y ternura.
Una noche tormentosa, desapareció. El granjero, preocupado, salió a buscarlo. Cayó por un barranco y se fracturó la pierna. Entonces apareció Graznido. Su graznido angustiado llenó el silencio: guió a los hijos del granjero hasta el anciano.
Lo rescataron justo a tiempo.
Su lealtad lo salvó.


RELATO 15

EL PÁJARO GIGANTE

_En la granja, jamás había visto nada parecido._

Soltó la caña de pescar y dijo... Papá, mamá, tengo que volver al río porque lo tengo que salvar... ¿Salvar a quién? –dijo su madre– ¡Al pájaro gigante! –contestó–

Corría en todas direcciones reuniendo un arsenal que constaba de: un lazo de lana, una tapa de mermelada a modo de comedero y un puñado de arroz para atraer al "gigante".

La madre sabía de sus fantasías, pero aún así, yo, decidí acompañarlo...

Tenía razón... A los siete años todo parece enorme, incluso aquella preciosa grulla enredada en unas zarzas. 

Juntos, la liberamos.


RELATO 16

LA VIDA

Los primeros días de septiembre anunciaban el final de nuestras aventuras.

Sara y yo habíamos crecido en la granja. Conocíamos muy bien los secretos de aquellos animales. Cuando nacía algún potro o aparecían nuevos conejitos, la fiesta estaba asegurada. Les poníamos nombres, limpiábamos su espacio, y observábamos sus movimientos.

Un día, sin darme cuenta, Sara me cogió de la mano.

La tierra que estábamos pisando, el frescor de la mañana...Todo se transformó en algo perfecto.

Hoy, sesenta años después, he vuelto a la granja. Sin ella.
 

RELATO 17

LOS GUARDIANES DEL VIENTO 

Carlos y María subían cada tarde al cerro con frascos vacíos. Decían que cazaban vientos para guardarlos,
"por si algún día se perdían".
Los vecinos los veían salir con el soniquete que les acompañaba en sus tarros:"¡Corre María, que se va a escapar!....¡Ainnnsss Carlos, déjame respirar!...¡Me pesan cada vez más!". Todos se reían de los niños. Pero un día no se podía respirar, todo se paralizó.
Carlos y María podían al fin respirar tranquilos con sus frascos llenos de aire quieto.


RELATO 18

BUSCANDO MAGIA

Echaban de menos la vida en la ciudad y aquella casa que habían dejado atrás. Su madre les había dicho que se acostumbrarían, “este hogar es muy especial, oculta magia en muchos rincones”. 
 
Nadie sabe de dónde sacaron semejante idea, aunque lejos de conformarse se metieron donde no debían para encontrarlo.
 
Graznidos, alboroto, plumas, estampida… un corral vacío.

Gritos del dueño, gritos de su madre y una gran regañina. Varios días después, partieron. 

Mientras se alejaban de allí, miraban al cielo. Seguramente no volverían a verle, pero siempre estarían agradecidos al ganso de los deseos por haber cambiado su destino.

sábado, 5 de julio de 2025

RELATOS SEMANA 266

Foto Sandra Marcos

RELATO 1


PARA UNA VEZ QUE LO HAGO

– ¡¡¡Para una vez que lo hago!!! 

– ¡¡¡Lo mato!!!

Encima no debería enfadarme con él, se lo había dicho doscientas mil veces... "Cuando te quites la ropa de deporte, no la dejes en el suelo del baño, métela en la lavadora directamente."

Qué iba a pensar yo que la camiseta negra de Iron Maiden iba a joderlo tanto ¡¡¡A tres días de la boda!!! Y se me ocurre lavar la mantilla de mi abuela. 

Bueno, pues sí, lo mato. Iré monísima de penitente detrás del Cautivo esta Semana Santa.

Espero que esto no sea un mal presagio para los novios.

RELATO 2

DR. JEKILL AND MRS. JUDITH

No había día en que, tras una noche de farra por las calles aledañas a Marqués de Larios, no se mirara en el pequeño espejo del recibidor del piso que compartía con Judith y se sintiera orgulloso. Otros, orgullosa. Orgullo de haber fluido sin miedo. 

Tras despertar, un café solo con dos cucharadas de azúcar.  

Mientras el sol se cuela por los visillos de ganchillo y se refleja en el aceite de la tostada aún caliente, se le escapa una lágrima. No por arrepentimiento, sino por no recordar con quién compartió la madrugada. 

Nadie viene. Nadie llama. Siempre nadie.

RELATO 3

DE NEGRO A BLANCO, PASANDO POR EL GRIS

Con el cuerpo totalmente paralizado, nadie me ve ni me oye. 
Trato de hacer alguna señal. 
La fosa se vuelve más oscura y estrecha, me hunde hacia el fondo. 
La luz se hace cada vez más pequeña. 
El sonido exterior se apaga. 
Me falta el aire. 
Mi conciencia pasa del blanco al negro. 
Veo como mi cuerpo se asoma a un abismo profundo. 
Siento como caigo al vacío.
La sensación de asfixia abre aún más unos ojos desorbitados.
Intento gritar, pero mi voz es muda. 
Cuando creo que es el fin, siento una sacudida en mi cuerpo y despierto.
Vivo.


RELATO 4

QUIÉN SOY

¿Soy un velo blanco y una sonrisa?

¿Soy un velo negro y una cara que se carga de dolores antiguos?

No, estoy justo en el medio entre el continuo mudar del día y la noche.

Estoy hecha de instantáneos momentos, no miro atrás y tampoco adelante.

Simplemente estoy.

Soy un coche antiguo que te lleva a las termas.

Tú siempre puedes elegir entre, fría, templada o caliente.

Si miras al cielo en un día lluvioso verás que el agua fluye, siempre, en búsqueda de colores.

Yo soy vida y me encanta fluir.


RELATO 5

CUANDO ERA CHICA
 
Cuando era chica, me encantaba explorar los cajones de fotografías en el aparador del comedor de mi casa. Había un montón de fotos y negativos en sobres.
Pasábamos horas viendo fotos y mi abuela nos identificaba a los personajes desconocidos: "Es tu tío abuelo Antonio...,Es tu tatarabuela Inés". Nos relataba la historia de mi familia. Cuando poníamos los negativos en las ventanas, nos identificaba el día y las personas que aparecían en las sombras.
Era mágico ver cómo cobraban vida en la luz.


RELATO 6

DE BODA Y LUTO 

La casa olía a encierro y celos. 
Alba, vestida de encaje blanco, sonreía feliz pues se casaría la mañana siguiente.
Bernarda, su hermana mayor, desde las sombras, la miraba con odio silente. 
Nadie hablaba del deseo reprimido, del amor que, a cuchilladas, sentía por su cuñado. 
 _“A mí me encerraron con rezos y vergüenza; a ti te visten de flores”_, pensó con amargura. 
La madre siempre dijo que el deber era mayor en la primogénita.
Bernarda cumplió. 
Alba escapaba. 

Aquella noche, mientras la casa dormía, dos corazones latían con rabia. 
Uno, bajo un velo blanco. 
El otro, bajo negro luto.


RELATO 7

EL LIBRO DEL DESTINO Y LAS PREDICCIONES

Soy Matusalén, un libro que viaja en el reloj del tiempo, guardián de los recuerdos y del destino.
Mis páginas transitan del presente al futuro… para regresar siempre al mismo episodio.
Se corre un visillo. Unos ojos verdes brillan en la penumbra, como estrellas. Una sonrisa silenciosa se dibuja.
Al frente, una sombra se perfila en la ventana. Sus ojos oscuros miran con ternura a la vecina.
Así pasan los meses.
No hay casualidades: yo soy el destino.
En la biblioteca eligen el mismo libro.
Ríen, olvidan la lectura…
Comienzan a conocerse. Se amarán…
Mis páginas vuelven a girar.


RELATO 8

¿DÓNDE HABITA LA TRISTEZA?

Cada día, Sofía se esforzaba mucho por ver el lado bueno de la vida. 
La llegada de la noche era una tregua entre batallas de melancolía que se libraban dentro de su cabeza. A medida que sus ojos se cerraban, sentía que su mente levantaba el vuelo y se abandonaba a la libertad de los sueños. 
Las horas entre el amanecer y el crepúsculo se iban convirtiendo, cada vez más, en una cárcel.
Hacía tiempo que intentaba teñir su alma con pensamientos de colores vivos, pero el fracaso diario la estaba dejando exhausta. 
Había llegado el momento de pedir ayuda.


RELATO 9

¿VENGANZA?

No iba a dejar escapar a la asesina de su hija, cuando la policia, además, buscaba a un varón de pelo moreno de mediana edad.

Escondida en el rellano de la escalera, oyó como estaba a punto de salir. Intentaba borrar de su mente los sonidos de las televisiones y discusiones vecinales para concentrarse en su venganza.

Al abrirse la puerta, se abalanzó sobre ella al mismo tiempo que le arrancaba la peluca, dejando al descubierto la malla que ocultaba su melena rubia, pero el mecanismo que ocultaba en su manga una daga, atravesó su dolorido corazón...

¡Hija de p...!


RELATO 10

ENTRE VELOS

Durante un tiempo, vivió entre dos mundos. Aprendió a decir lo que todos esperaban: “Estoy bien”, “No pasa nada”, “Gracias por preocuparte”. Era luz, sonrisas, paciencia. La que tejía su lugar en el mundo.
Pero al caer el telón de la rutina, se deshacía en sombras. El miedo tenía rostro, y la noche, peso. No eran dos: era una sola, dividida. Una mitad resistía, la otra sobrevivía.
Hasta que un día dejó de esconderse. Mostró su luz y sus sombras, su sonrisa y sus heridas. Porque solo quien ha caminado entre ambos lados sabe lo que cuesta mantenerse en pie.


RELATO 11

LA EXPOSICIÓN 

He pasado quince años huyendo de su recuerdo. Pero hoy, al abrir la revista, su nombre me golpeó llevándome casi al comienzo:

Exposición de Eva Fontalba.

Dentro de la sala, nuestra historia revivía fotografía tras fotografía. En todas asomábamos las dos; nuestras risas tímidas del comienzo, las manos enlazadas, los platos azules, nuestra despedida en Toulouse…
Juntas en cada imagen, en cada sombra, en cada luz.
Nuestro amor truncado lucía congelado en papel.

La vi, sentada al fondo de la sala, reconociéndome desde lejos como un zorro hambriento. 

El dolor me habitó desacompasado, como un grito a destiempo.


RELATO 12

EN MI JAULA

Soy las dos caras de un mismo ser, la herencia que me dio la vida y la sombra silente que late en mi pecho. Realidades distintas que viven en mi interior. 

Me desgarra la duda, me condena este juicio sin ley ni absolución.

¿Soy Jeckyll o soy Hyde? ¿Soy prisión o deseo? 

Una mente cautiva en una celda sin barrotes de la que no puedo escapar que me atormenta y castiga.

Mi yo se divide entre la evidencia de mi cuerpo y el sentimiento del ser que me siento.

Hoy romperé los hilos invisibles. Me sentiré libre al fin.


RELATO 13

POR VERTE TOREAR

Con una preciosa mantilla blanca fui por primera vez a verte torear. Eras el más valiente, el más elegante. Después de cuatro meses nos casamos. Engendré a tu hijo y con él te esperé en casa, el corazón en un puño, día tras día, a que llegaras ileso. 
Un día no volviste. 
Bien entrada la noche, medio loca, me tiré a la calle a buscarte. Encontré a tu cuadrilla, seria, encogida, pensando cómo decírmelo. 
Entonces tinté mis ropas de negro para ir a enterrarte. Sin poder evitarlo, mi corazón quedó también teñido, bajo una negra, negrísima, mantilla.


RELATO 14

LA BELLEZA
 
─ Espejito..., espejito mágico..., dime que soy la más bella. Dame por un día el privilegio de sentirme única. Miente sin remordimientos, que soy yo quien te lo pide.
Llevo tantos años sin subir al trono de las afortunadas, que necesito y suplico que me regales el momento. Elígeme entre todas. Nómbrame. Ten compasión, antes de que la muerte me reclame.

─ Lo siento, no puedo atender tu súplica. No hay belleza en tu rostro. Ni en tu cuerpo.

─ ¡Pero hay belleza dentro! Y mis pensamientos son limpios. Igual que mi pasado.

─ Eso no alcanzo a verlo.


RELATO 15

CRUZ... ¿O TAL VEZ CARA?

Silvia se asoma temprano a la ventana para saludar a la vida. Desde la oscuridad de su noche se despide, igualmente, del recién estrenado día. 
Su percepción se distorsiona hace dos años, entendiendo que la vida viene y se va al mismo tiempo. 
Mientras espera, la luz cegadora del nuevo día nubla su esperanza, que no deja de brillar. 
Su marido la saca de su ensimismamiento cogiéndola del brazo y acompañándola a la ambulancia que llegó para recogerla.-¡Cariño, eres una campeona, vamos por la décima sesión! 
Silvia se deja llevar, consciente de que no habrá una undécima.


RELATO 16

TURNO 48

La sala blanca olía a desinfectante y a burocracia.
Sentada, hojeaba una revista. Todas las portadas mostraban su cara.
— Turno 47 —anunció el altavoz, con tono de fastidio.
Se levantó y entró. El juez sorbía un batido digital.
— Tenemos su cuerpo original, versión 3.2. También la copia premium: sin traumas ni ansiedad. ¿Cuál se queda?
— ¿Hay garantía?
— Solo en la digital. Pero viene con anuncios.
Arqueó una ceja.
— ¿Y si no quiero ninguna?
— Eso no está en el protocolo.
Pulsó su propio “modo destructor”.
El juez hizo “pop”.
— Turno 48 —dijo una tostadora.
Salió silbando. Libre, imperfecta e irrepetiblemente real.


RELATO 17

50 - 50

Dicen que todos tenemos luz y oscuridad en nuestro interior y que está en nuestra mano qué parte queremos potenciar. Aspirar a priorizar lo bueno es lo normal, claro que yo nunca me he sentido identificada con esa palabra. 

Soy estrictamente cuadriculada. Por ejemplo, cuando le cedo a alguien el asiento en el metro hago que se tropiece al levantarse; si ayudo a mi vecina con las bolsas de la compra dejo caer algunos productos por las escaleras y cada vez que riego las plantas del edificio pisoteo algunas. 

Contrarresto cada buena acción para mantener un perfecto equilibrio.


RELATO 18

LA MUJER QUE SE QUEDÓ 

Me he sentido perdida tantas veces y otras tantas he vuelto a encontrarme.
He sanado heridas que aún duelen si las nombro, librado batallas en silencio, he querido rendirme, me he decepcionado, pero también me he mirado con ternura y me he perdonado.
Siento que ha llegado el momento de soltar esa parte de mí que ya no soy. 
Ahora quiero otra cosa, quiero ayudar, quiero luchar por lo justo.
Quiero amar sin miedo, vivir sin armaduras.
Quiero, simplemente, estar en paz.
Y aunque no sé muy bien a dónde voy, tengo más claro que nunca quién soy.


RELATO 19

CÓDIGO CLARA

Cuando Clara llega a la residencia, parece que una luz divina ilumina la estancia.

Los abuelitos la adoran, es guapa, sí, pero lo que la hace hermosa es su forma de hacerlos sentir importantes:
su mirada cálida, su sonrisa,
su paciencia escuchando historias como si fueran tesoros y sus manos, esas que les alivian y reconfortan tantísimo.

Lo que no saben es que Clara de noche se transforma, se enfunda un traje de cuero y sale a impartir justicia… silenciosa, sigilosa, letal… sin dejar rastro. Sus manos, esta vez, también hacen su función:
acabar con los indeseables de la ciudad.


RELATO 20

El DÍA Y LA NOCHE

Me casé en un día precioso, llena de ilusión y esperanza para tener una vida mejor. Ahora sólo salgo de noche, cuando el mundo duerme. No quiero que me vean por si tengo que mirarles a los ojos, pudieran intuir algo y tuviera la obligación de matarlos a ellos también. Mis padres me ignoraron y mi marido me maltrataba. La muerte es lo único que merecían. Ahora me cuido yo sola.


RELATO 21

Y DEJÉ DE SONREÍR 

De pequeña, por el ambiente familiar, dejé de sonreír.
En la adolescencia, cuando el acoso era mi rutina, dejé de sonreír.
En el matrimonio forzado, para escapar del pasado, dejé de sonreír.
Por mis hijos, egoístas y díscolos, dejé de sonreír.
Por el qué dirán, dejé de sonreír.
Ahora, en el otoño de mi vida, plácido y dulce entre cortinas y atardeceres y risas cómplices y habiendo dejado atrás la amargura de una existencia hueca, he conocido el amor verdadero por alguien inesperado y distinto, que ha inundado mi corazón de alegría.
Y por fin, he vuelto a sonreír.