viernes, 27 de octubre de 2023

RELATOS SEMANA 180

 

Foto EL MUNDO

RELATO 1

PINGÜINOS Y DEUDAS 

Llevo toda la semana soñando con pingüinos. La primera noche era uno solo. Subía por la ladera de un iceberg y luego se deslizaba hasta el agua. La segunda noche aparecían unos diez y hacían lo mismo. Lo de anoche fue una pesadilla: cientos de pingüinos me perseguían hasta atraparme mientras intentaba correr por el hielo.

Dicen que si sueñas con pingüinos es que sabes adaptarte a las adversidades. Pues me viene muy bien, porque acabo de ver por la ventana a mi cobrador del frac. Tengo que quitármelo de encima. Hoy salgo por la puerta de atrás. 

¡Malditos pingüinos!

RELATO 2

MISIÓN EN EL POLO

¡¡Agente Munlaight!!, ¡¡Agente Munlaight!!
¿Pero qué hace en ese aisber disfrazada de pingüino?
 ¡¡Responda agente Munlaight!!
Le dije claramente que que tenía que ir a Tomelloso por lo del crimen de las siete bellotas y ahora me la encuentro ahí, en tol hielo y...

_"Pero ¿qué dice este hombre? Tengo estalactitas hasta en el corvejón y ahora dice que tenía que estar en Tomelloso..."_

_"Pero Comisario, me ordenó que fuera a Groenlandia por lo del asesino que se disfraza de oso polar y..."_

_Con lo agusto que estaba yo recolectando habas en Perales de Tajuña..._

¡Regrese a la base inmediatamente, agente Munlaight!

RELATO 3

Aplicaciones

Otra vez conectándome a pingüinder:

— Contacto con un macho muy atractivo, pescador , muy divertido y que le gusta Bailar.

Tras varios días de chateo, por fin llega el día del encuentro. 

Quedamos en “isla cabeza de pingüino”, en el ojo de la derecha, cuando el Sol esta en lo más álgido.

Llego con todas mis ilusiones, después de nadar 30 minutos, al sitio planificado, me coloco bien visible, para que no pueda equivocarse.

Pasa más de una hora, y no aparece nadie… otra vez “Ghosting” … que se le va a hacer, tendré que volver a casa y picar por el camino.

RELATO 4

ME LLAMAN LOCO

Todos se ríen de mí. Cuando suelo enseñarles aquella foto. Me dicen que son invenciones mías y que jamás pudo existir semejante maravilla de la Naturaleza. Corre el año 2080 y después de la tormenta solar escala G5 de 2024, (tres veces mas potente que la de 1859), destruyera absolutamente todos los sistemas eléctricos, pasamos de la maravillosa era digital a otra edad de piedra, en un mundo desértico y con escaso o nulo soporte didáctico. Los libros son una utopía, pero yo, descendiente de bibliotecarios conservo el mayor tesoro del planeta, una enciclopedia fotográfica con mi foto del iceberg.


RELATO 5

*Problemas del _"Primer Mundo"_*

Mauro se sentía muy afortunado.
Su trabajo en remoto le permitía vivir cómodamente. Incluso dedicarle demasiadas horas al día lo consideraba una suerte.

Tenía muchos _"amigos"_ distribuidos en distintos grupos de WhatsApp, a los que cada mañana, sin excepción, deseaba los _"Buenos días"_ acompañados de fotografías con frases con todo tipo de bendiciones y parabienes.

Un día se percató de que hacía tiempo que nadie le respondía. Comprobó que todos los miembros de todos los grupos los habían dejado.

No se le ocurrió pensar que sus saludos mañaneros eran el motivo. 

Se sintió como un pingüino abandonado en un iceberg.

RELATO 6

El susurro del hielo

Cualquiera de nosotros puede convertirse en un asesino. 
Juan lo sabe en primera persona. 
Ahora su alma siente la soledad de un iceberg en medio del océano, aunque realmente está rodeado de celdas habitadas por otros humanos.
Lo peor es que el rencor y el odio no han desaparecido. Sabe que le acompañarán toda la vida.
Su corazón, convertido en bloque de hielo, sigue susurrándole "mátalos, mátalos", como hizo segundos después de verlos abrazados y asestar el primer golpe.

RELATO 7

Congreso Internacional de Prácticas para la Crisis Climática

    El congreso se celebraba en Puerto Argentino, en las Islas Fakland.

    Estábamos convocados más de cien organizaciones gubernamentales de todo el mundo para establecer una estrategia común que mejorara las emisiones de CO2 y de gases de efecto invernadero.

    Muchos habíamos cogido hasta tres vuelos distintos para llegar allí, incluyendo aviones de alquiler.

    El hotel era muy confortable, con una potentísima caldera de calefacción a base de gasoil.

    Como cierre del congreso nos acercaron a la Antártida en un supercrucero a ver estampas bellísimas provocadas por el deshielo.

    Volvimos todos muy motivados y con la disposición de practicar lo aprendido.


RELATO 8

QUIENES TE ACOMPAÑAN 

Siempre fuiste frío, acerado. Elegiste a mi madre (a quien maltrataste diariamente) por su ingenuidad y, mayúsculamente, por su nivel socioeconómico.

Traté de entenderte; a mamá también por preferirte antes que a sus cuatro hijas. Aprendí a aceptarlo para navegar tranquila por la vida. 

Lo cierto es que nunca os eché de menos, no os guardo rencor. 

No tener un hogar con tus padres resultaba normal, aunque sentía suspicacia en la mirada de compañeras del colegio, “¿vivís con vuestra abuela?”. Cuando ésta murió, “¿por qué estáis internas?”…

Hilvanando sucesos creces mentalmente rápido y adviertes, lúcidamente, quién es tu verdadera familia.

RELATO 9

¿Equivocación o conspiración?

Viajar sin coger un avión y vivir toda una aventura era algo imposible hasta hace poco, pero gracias al ingenio y a la tecnología se hizo realidad. Conocer parajes naturales a través de un cuerpo animal revolucionó mundialmente el concepto “vacaciones”.

Sin embargo, la empresa fundadora “Sueños salvajes” se enfrenta a una situación extremadamente delicada. Ya son 27 días desde que un inesperado fallo en su sistema dejó atrapadas a cientos de celebridades en sus simulaciones, entre ellas al presidente del gobierno español.

La incertidumbre crece al no saber qué tipo de secuelas acarreará participar en una experiencia tan prolongada.

RELATO 10

El amor no se rige…

Discutíamos sobre distintos puntos de vista.
La última palabra:
¡Divorcio!
¡Boom! El morro de la avioneta, se hundía en la Antártida, vi como es obvio un gran manto blanco; también unas palabras que se desgranaban como filigranas, con una iluminación inusitada e inexplicable:
“El amor no se rige por ideologías, ni por religiones, él, es amor, no se rige”…
Intentando salir, le digo a mi pareja , lo que leo. Él no lee, escucha las mismas frases. 
Nos fundimos el uno en el otro.
“Hemos vivido muertos, ese día comprendimos el sentido de la vida, de la felicidad.”

RELATO 11

LA PLAZA DE LA FUENTE DEL CISNE

¡Los había de todos los sabores y me encantaban!

Allí nos citábamos los viernes todos los de la panda y echábamos la tarde en los bancos de la placilla.

Después nos lavábamos las manos en la Fuente del Cisne que estaba allí mismo, en el centro.

Me gustaban los de nata y lo prefería en vasito con cuchara de color. Con el cucurucho siempre acababa lleno de lamparones de arriba abajo.

En los helados de Vega siempre ponían un muñequito dentro del helado, como en los roscones de navidad. Los pingüinos eran mis favoritos y los tenía casi todos.

RELATO 12

RECUERDOS

Adoraba este lugar. Su paisaje, su olor a campo fresco, el sonido del río, los distintos verdes y los grises del cielo matizados por el poquito sol; la solidez de las montañas que cierran y protegen este valle. 

Añoro aquellos paseos, sola, saboreando toda esa naturaleza que me invadía y me deleitaba con la inmensa paz que solo puede dar la pureza del campo.

Cuán relacionados están las sensaciones con los sentimientos. 

Pasados veinte años, con mis sentimientos rotos, lo que siento ahora es un frío intenso que me paraliza. Como si esas montañas que tanto me arropaban se hubiesen tornado en gélidos glaciares.

RELATO 13

LO QUE QUEDA

Eminentes científicos se disputaban desde hacía años si su existencia era realmente auténtica
o fruto de leyendas que flotaban en el aire desde hacía siglos.
Él llevaba millones de años nadando plácidamente en las profundidades del mar tropical.  
Era el último que sobrevivía de su especie, pero cansado de aquella vida oculta, 
decidió emerger a la superficie. 
Fue el único error de su vida;
la Antártida no era el lugar acogedor de sus antepasados. 
Ahora un pingüino monta guardia sobre un enorme bloque de hielo, 
su cráneo es todo lo que queda del rinoceronte marino.

viernes, 20 de octubre de 2023

RELATOS SEMANA 179

 

Autor desconocido 

RELATO 1

AMIGO INCONDICIONAL

Lloraba porque mamá me regañó al bañar a mi viejo y churretoso peluche en el cubo de agua que llenaba diariamente para beber.

Inmediatamente tendió mi osito al sol y me tomó en brazos para consolarme.

Secaba mis lágrimas con puñados de besos cuando, de repente, empezaron a caer bombas por todas partes.

La gente gritaba, corría en todas direcciones… mamá me apretó contra su pecho e hizo como los demás, hasta que tropezó y caímos de boca. No podía moverme, su peso me aplastaba.

A lo lejos mi amigo, chorreando, confiaba en que no lo abandonase y siguiéramos jugando

RELATO 2

Apocalipsis

    Cuando Hamás atacó los kibutz próximos a la frontera y lo retransmitió, se entendió como las peores escenas terroristas vistas dentro del conflicto palestino-israelí. Pero las que vimos después las superaron.

    La ira del dios de Israel cayó despiadada sobre la población gazatí en forma de misiles con una crueldad inusitada.

    A Zahwa, de 6 años, el bombardeo le pilló en el colegio.

    Corrió llorando y asustada buscando a su familia. Su calle se había convertido en un montón de escombros. Despavorida, reconoció restos de su casa.

    Solo quedaba, en el patio, su osito de peluche secándose en el tendedero.

RELATO 3

EL PAYASITO 

Muchos inviernos habían pasado.
El payasito siguía con su carita pintada de rojo y blanco, diviertiendo a los niños; al terminar su actuación gritaban, lloraban, reían.
¡Que vuelva payasito!
Siempre volvía.
Ese día no volvió.
Caminaba con su bastón, sobre una estela dorada. 
—¿Donde estoy?
—Estas en el mundo de los duendes y las hadas.
—¡Eres tú! Mi osito de la infancia.
—¡Si! Te esperaba. Ahora alegraras a los pequeños, que dejaron el mundo.
Payasito con osito de su mano, recorría el arco iris, llevando color y risas a ese, su nuevo mundo de las estrellas.

RELATO 4

SU TESORILLO 

Estaba anocheciendo y me levanté de la butaca. Ella estaba hipnotizada en su cama mirando un documental de la 2. Corrí las cortinas, apagué las luces, me acerque y le di un beso en la frente dándole las buenas noches.

Cuando me disponía a salir de su habitación, llamó mi atención angustiada para recordarme que no quería estar sola. Yo sabía lo que significaba aquello... 

Me acerqué al lavadero, descolgué su osito recién lavado y lo tumbe a su lado.

Su triste mirada se tornó en alegría, y su inquietud en tranquilidad. 

A sus 105 años, mamá era una niña.

RELATO 5

Osito traumado

Aunque somos súper-mega amigos y dormimos siempre juntos, ahora no habla ni me cuenta cosas.

Primero pensé que estaba enfadado porque el otro día lo olvidé en el sofá. Aunque estaba oscuro, iba a ir a buscarlo; pero escuché hablar al tito y creí que le gustaría tener compañía al dormir en el salón. Dijo algo de "echar polvo" y mamá contestó "rapidito"; no entendí nada porque ella siempre me pide que sea limpia.
 
Ahora sé que está enfadado porque le ensuciaron. Lo he metido en la lavadora para que volvamos a ser amigos y me explique lo que vio.

RELATO 6

UN TRABAJO PELIGROSO

Cuando compré mi casa, entre los enseres que hallé, un muñeco de trapo pendía de una pinza en una cuerda.
Nadie me cree.
Instantáneamente, el muñeco se comunicó conmigo mentalmente. 
Algo sobrenatural habitaba aquel cuerpo esponjoso y con olor a polvo. Martilleaba mi cerebro con extrañas cifras y con gente que quería quitarme la casa.
Me dolía la cabeza y no podía soportar su verborrea, así que le tapé la boca en un intento desesperado por recuperar mi paz. El murmullo cesó y....

_"EL CASO"_
_Madrid, 16 de marzo de 2023._
_Agente inmobiliario brutalmente asesinado mientras enseñaba un piso en Usera_

RELATO 7

TRAVESURAS

Corrimos todo lo que pudimos, lo que nuestras cortas piernecitas dieron de sí. El ruido era espantoso, los cohetes tronaban en el cielo y los deslumbrantes destellos, lejos de tranquilizarnos por iluminar nuestro oscuro camino, nos aterrorizaban aún más. Llevaba de la mano a mi hermana pequeña, apenas tres añitos, y yo, con casi seis, poco o nada podía hacer para que corriera mas. ¡¡Mi osooooooo!! Berreaba. ¡Sigue mojadooooooooooooooo!
¡DEPRISA! Grité.
¡Papá y mamá nos estarán buscando y nos van a castigar por habernos escapado para ir a la feria sin permiso! 
Por los pelos pudimos entrar sin ser vistas.

RELATO 8

A DOS VOCES

Le habla todo el rato y él le contesta. Son dos voces que salen de la misma boca chiquita en medio del silencio.

Lo arrastra por el piso cuando lo lleva de la mano por la casa. Lo arrastra por los parques, levantando la hojarasca a su paso. Le enseña el lenguaje de signos.

La madre ha cosido un botón negro donde el oso perdió un ojo; despliega con la niña todos esos gestos y afectos que no le permiten las palabras dichas.

Laura tiene seis años. Oto es su oso. Lo que hablan juntos llena de colores su mundo.

RELATO 9

Una historia de amor verdadero

Brillan en mi pecho mil bolas de cristal, lucen desde que llegaste, y nunca se irán. 

Dicen que no existe manera de transmitir la lógica humana, pero lo dicen porque desconocen el tacto de tus deditos en mi espalda cuando me abrazabas. 
Depositabas tu pequeña cabeza en mi hombro, y sonreías, te sentías confiada y a salvo. No existe amor más puro, yo te entregué mi libertad y tú me hacías sentir inmortal. 
Hoy cumples 32, pero sigues siendo mi osita de peluche, mi amor verdadero.

RELATO 10

PSICOMAGIA

(dedicado a Jodorowsky)

Buscaba el símbolo de aquella infancia olvidada.
Agujero negro, dentro del lago oscuro de su subconsciente.
Cada noche soñaba la misma escena:
un cine, fila de atrás, película en marcha, su padre le cogía de la mano,
él apretaba un osito de peluche contra su pecho.
Entiérralo, olvida tu infancia, le ordenaba la voz de su padre.
Luego nada, sólo el ruido de pasos, gritos lejanos.
Ahora, dos adultos, desentierran las arenas del tiempo en la orilla del mar.
Con gestos lentos reconectan su vínculo roto. 
"¡ Aquí está!" Se abrazan felices.  
Osito observa mientras cuelga para secarse.

RELATO 11

SU “MI” PRIMER PELUCHE

Una suave lluvia rubricaba mi tristeza, me atrincheré en mis recuerdos.

Mis tíos nos traían por Navidad un completo estuche de colores para mi hermana, y para mí, cuatro años menor, un osito de peluche.

En otra ocasión papá volvía de viaje con un suave conejito blanco para ella, y para mí una muñeca. Yo me encapriché del peluche nuevo y quise cambiárselo por mi “ya” tuerto osito. Mi dulce hermana mayor nunca supo negarme nada; afirmaba ser yo el mejor regalo de su vida.

Con lágrimas, hoy clausuro su antiguo desván. Aún conservaba mi maltrecho peluche de triste mirada.

viernes, 13 de octubre de 2023

RELATOS SEMANA 178

Fotografía anónima 

RELATO 1


DESPILFARRO


La boda perfecta. 

El gran salón estaba listo. Todos habían llegado, los invitados, los fotógrafos, el alcalde, los testigos. Incluso el bisabuelo de la novia estaba allí. 

Pero algo no estaba bien. Todos se miraron asombrados y al unísono señalaron la única silla apoyada en la pared que reflejaba su sombra.

 En el suelo, el semicírculo de flores blancas esperaba a la otra mitad. 

El novio tambien esperando su prometida . Ella nunca llegó. 

Qué desperdicio, dijeron todos, saliendo conmocionados: una corona incompleta, una novia invisible, una silla que falta. 

¡No! Es un despilfarro total , gritó llorando el novio.
 

RELATO 2


Al pie de la letra


En un primer momento no pensamos que fuese a durar mucho allí puesta. Como la primera vez que recurrimos a ella lo pasó realmente mal, no concebíamos que se repitiera.


Sentarse en “la silla de pensar” nació como castigo por mal comportamiento, pero debe haber algo que se nos escapa porque la niña no es mala. Sin embargo, todos los días se coloca sobre el asiento y pasa varias horas reflexionando sobre vaya usted a saber qué.


A sus ojos es un altar; no nos deja acercarnos, ni tocar la estructura de madera. Creo que fallamos al bautizar esa práctica…


RELATO 3


La cabaretera


El 13 de febrero de 1972 cumplí 13 años. Aquel día mis padres volvieron a regalarme lo que más me gustaba: una sesión de cine.


Llevábamos más de treinta años de censura así que cuando, a pesar de mis pobres conocimientos de inglés, entendí lo de _"un tigre es un tigre, no un cordero, señor"_ algo se abrió en mi cabeza. 


Aquella noche decidí ser lo que he sido hasta que mi cuerpo me lo ha permitido: bailarina.


La película era _Cabaret_, la canción Main Herr y el descaro de Liza Minnelli fue siempre mi inspiración.


RELATO 4


CHURRUCA, QUE SE ME CASA LA NIÑA


—¡Mi Saray, que se me casa! Cuatro trajes, _brilli-brilli_, la corona...


_¡Pechá_ sesiones con _La Churruca_! Vestidos de princesa, de sirena, _los doraos_, el blanco _pal_ "sí quiero" _pa mostrá_ la honra...


—No _te socurra engordá_ que nos pilla el toro —aseveraba la modista. 


Pero gitana _mu normá_ no soy, sino el garbanzo _más negro'l puchero_.


_Pa_ no darle un mal rato a mi madre, le dejé hacer. Seguí con mi _preñao_ y el vestido de boda lo rediseñé cuando, antes de salir, le arranqué cuatro vueltas al bajo y lucí en minifalda. 


Ver esas caras... ¡lo mejor del día!


RELATO 5


La despedida


    Te ruego me perdones. No puedo decorar tu celebración.


    Hace treinta años murió mi esposa cuando te alumbró. Desde entonces hemos estado siempre juntos.


    Mi niña, representación de su madre, único sentido de mi vida, se va.


    Te casas con un funcionario de Australia que conociste en un viaje con amigas. Es para tí un momento feliz, y yo me alegro por ello, pero siento que no podré sobrevivir a esta segunda pérdida.


    Supongo que pensarás que volveremos a vernos algún día, pero yo no lo creo. Habré muerto de pena.


    Te ruego me perdones. No puedo decorar tu despedida.


RELATO 6


La silla


Por mi trabajo, tenía que recoger los muebles que los vecinos tiraban.

Había una calle especial, una casa especial, cada vez que pasábamos, había una silla diferente para tirar:

Silla de enea.

Silla Luis XV.

Silla de caoba.

Silla decapada.

Silla carcomida.

Silla de forja.

Silla plástica.

Silla de aluminio…

Un día pasé, no estaba, había un revuelo en la casa.

La anciana, la encontraron muerta en una silla, al lado, otra vacía, encima un ramo de lilas, con el nombre de su amado. Esquela: “Te espero. “

RELATO 7


A TRAVÉS DEL ESPEJO


Nadie puede vernos totalmente, sí fugazmente por el rabillo del ojo o intuirnos, pero, ahí estamos. Solo la niña pequeña de la casa nos ve claramente. Ahora mismo, sentado en la silla contemplo como le dan una mano de pintura al salón. Antes era yo el pintor, pero desde que soy un fantasma me limito a observar, no podré avanzar hasta que no averigüe qué me pasó. 

Alguien se está subiendo a la silla, por no coger la escalera.

 ¡Catacrakkk! 

Silla volcada, cabeza abierta y… ¡¡ya sé que me pasó!! 

Yo también me caí. Ahora ya somos dos los fantasmas!!


RELATO 8


Plena


Con una guitarra de fondo y la visión de esta sala colorida, se alumbra en mi cabeza la idea de que mi alma está plena. Ese puzzle deshecho que era a los 16, ahora por fin está unido con un engranaje de amor propio y de aceptación. 


Así que me quedo sentada en esta silla, de aquí no me levanta nadie.


Y la iré moviendo donde surja, a veces me levantaré, paseando por otras almas, ayudando en lo que pueda. Pero siempre volveré a ella, mi querida silla rodeada de tul esponjoso.


RELATO 9


La silla adivinatoria


Asun, la de Carratraca, más conocida como Madame Telodigotó, encontró una silla en el descampado que hay junto a su casa. 

La mujer, andaba mal de dinero y se abastecía de lo que encontraba por ahí.

Después de adecentarla, se sentó para probar su resistencia y entonces una voz metálica le dijo: _"Te se va a estropear el grifo del bidel"_.


Asun, aterrorizada, acudió al baño y efectivamente, el grifo soltaba agua desaforadamente.

Descubrió entonces que la silla adivinaba el futuro y decidió obtener rendimiento, estableciendo un gabinete adivinatorio.


Junto con la sesión, regala a sus clientes un tupper con torreznos.


RELATO 10


¡QUÉ BONITA LA VIDA!


Abre el día. Alba echa los pies al suelo y da las gracias.


 Asoma a la ventana, el cielo es gris, agradece al gris que la deje en casa devorando libros. Agradece al sol, si asoma, que la invita al encuentro con el mar y los amigos.


Adorna los días. Ve una silla desierta y la imagina sumergida en flores, desprendiendo aroma a lavanda aunque sean hortensias.


De eso se trata. De vestir este rato que pasa por aquí con su mejor disfraz.

¡Qué bonita la vida, dice, qué belleza hay en encontrar la manera de reunirnos y hacerlo posible!


RELATO 11


¡VIVA LA VIRGEN DEL CARMEN!


La abuela era una auténtica devota de la Virgen del Carmen, y cuando se iban acercando las fiestas, ponía en guardia a toda la casa...


- _Isabelita, ¿Te has traído los alfileres, agujas...? ¡¡¡Los hilos!!!_


- _¡¡¡Joaquín!!! Llégate a buscar las banderolas, verdes, rojas y amarillas._


_- ¿Pepe? ¿¿¿Dónde estás??? ¡Ah! Ven aquí anda, ayúdame a colgar las guirnaldas._


Todos a las órdenes de la matriarca, no había ni un segundo que perder para que la familia recibiera las fiestas como es debido. Ni un rincón quedaba sin engalanar, ni una vela sin encender, ni nadie sin la emoción que contagiaba la abuela.


viernes, 6 de octubre de 2023

RELATOS SEMANA 177

 

Foto autor desconocido

RELATO 1 


UN DRAGÓN NEGRO EN LA OCURIDAD 


Aquella callejuela del _Barri Gòtic_ le producía terror. Armado con una maza, pasaba diariamente con la intención, según él, de derrotar al Dragón que surgía de las paredes de piedra para robarle su existencia.


En una de aquellas ocasiones, fue sorprendido por los _Mossos_ martilleando las paredes y columnas góticas, batiéndose con una Bestia que solo él veía. Detenido y esposado, la mirada horrorizada de ese hombre les convenció de su falta de cordura.


Mientras era trasladado a comisaría, uno de los _Mossos_ se quedo haciendo guardia en el lugar, pero desde aquella noche... nunca más se supo de él.


RELATO 2


Es conveniente no banalizar el más allá


En la prefectura de Lyon, estaban inquietos por la inexistencia de actividad vital en el cercano pueblo de Bessenay.

Los consumos de agua, gas, incluso telefonía, habían cesado de un día para otro. 

Tan sólo registraban una discreta demanda eléctrica nocturna.

El jefe de policía, acudió al pueblo con dos gendarmes para dilucidar el misterio.

Allí encontraron la nada más absoluta. Aquello era un pueblo fantasma.

Sin embargo, las farolas de todas las calles brillaban intensamente y de forma periódica. Uno de los gendarmes sugirió que podría ser un mensaje en morse. 

_"De aquí no vais a salir"_, le pareció entender.


RELATO 3


Donde todo empezó


El alumbrado de la calle ofrece sus últimos minutos de luz. Caminan en silencio, intentando no pensar en lo que les aguarda. Pronto estarán lejos de allí y la ciudad empezará a despertar.


Hace tiempo que todo es distinto, pero 24 horas juntos dan sentido a su realidad. Quieren detener el tiempo, permanecer juntos y no tener que amarse desde la distancia. Desean la vida que no pudieron tener.  


Se funden en un tierno abrazo. La noche termina de perecer, llevándose con ella sus espíritus que se desvanecen.


El próximo aniversario, en el lugar donde se conocieron, volverán a encontrarse.


RELATO 4


Un toledano que habla catalán y tiene casa en Sanlúcar de Barrameda


En 1890 se instalaron en Toledo 22 farolas que funcionaban con energía eléctrica.


Atrás quedaron las farolas de gas, que lucían evocando un ambiente bucólico, pero facilitaban el trabajo de los amantes de la propiedad ajena, que protestaron a tal efecto.


Tal fue el caso del Sindicato de ladrones toledanos ( SLT ), manifestándose durante tres meses hasta que llegaron a un acuerdo con los Lampareros, consiguiendo que los viernes se apagaran las farolas, de lo que también hicieron uso los enamorados.


En esa época, un viajante catalán enamoró a una maestra de origen andaluz. 


A los 9 meses nació mi tatarabuela.


RELATO 5


La mirada indiscreta


Los árboles otoñean llenando de colores el parque donde nos conocimos. Esta estación llega siempre teñida de nostalgia, ¿verdad? O quizá soy yo, que llevo en la memoria demasiada añoranza. 


Paso por tu calle, solo para verte a través del cristal vahoso de tu ventana. El halo que abraza las farolas, deja en la sombra la pared del callejón y me permite mirarte sin ser visto. No te asustes, nunca te haría daño.


Siempre te gustó vestir a lo Audrey...


No sé porqué me cambiaste por ese que acaba de entrar, entre otras cosas, porque nunca contestas a mis mensajes.


RELATO 5


La mirada indiscreta


Los árboles otoñean llenando de colores el parque donde nos conocimos. Esta estación llega siempre teñida de nostalgia, ¿verdad? O quizá soy yo, que llevo en la memoria demasiada añoranza. 


Paso por tu calle, solo para verte a través del cristal vahoso de tu ventana. El halo que abraza las farolas, deja en la sombra la pared del callejón y me permite mirarte sin ser visto. No te asustes, nunca te haría daño.


Siempre te gustó vestir a lo Audrey...


No sé porqué me cambiaste por ese que acaba de entrar, entre otras cosas, porque nunca contestas a mis mensajes.


RELATO 6


La quinta


Al doblar la esquina del arco percibí que una sombra me seguía. Miré hacia atrás pero no vi a nadie.


Intranquila, continué mi camino acelerando el paso.


Oía pisadas al mismo ritmo que las mías. Comencé a sudar. La niebla me impedía respirar. Escuché el sonido de risas y algaradas de la taberna y rompí a correr hacia allí presa del pánico.


«Montse, no corris que la nit és llarga» me gritó riendo la tabernera con su acostumbrado escote descolgado hasta la barriga.


Sobre una mesa se leía en La Vanguardia «Ya son cuatro las víctimas del Destripador del Raval».


RELATO 7


VIDAS AJENAS


Con mi bicicleta y escalera recorro los suburbios encendiendo farolas al oscurecer. Durante segundos me meto en las vidas de otras personas cuando desde lo alto de la escalera atisbo por sus ventanas retazos de intimidades anónimas. 

La madre que llora a su neonato muerto por las fiebres, el marido que pega a su esposa, la cena en la mesa de una familia pudiente, la estufa apagada del estudiante pobre, el anciano que reza por miedo a la soledad… Esas historias las llevo conmigo durante mis sueños y pesadillas, afortunadamente, se diluyen al amanecer. 

Otra noche para conocer vidas ajenas.


RELATO 8


El farolero 


Sin faroleros (1930)


Soy un anciano solitario, estoy al abrigo de la oscuridad en un parque. Enciendo un cigarrillo.

Mi abuelo perdió su empleo; encendía faroles. Fumaba en un callejón oscuro. Se acercó un hombre con una mecha, le pidió fuego. Al alejarse, se encendieron los faroles.

Supo que era un fantasma, porque no tenía sombra.

Después de contar el incidente se llevó la mano al pecho, murió.

Mi abuela decía: El farolero, se lo llevó.


Un hombre me pide fuego se ilumina el parque. No tiene sombra. “Es el farolero”…


Al despuntar el día, encuentran un mendigo congelado.


RELATO 9


ÚLTIMO SUEÑO


Era el último de mis sueños, atrapado en el cajón oculto de mi corazón.

Faroles amarillos encendidos en la calle, donde de repente, 

todo se había convertido en piedra gris.

Intenté hasta el final iluminar el camino que habíamos recorrido juntos, 

reviviendo colores, risas y amor. 

Pero yo no pude hacer nada.

Al fondo hay una fortaleza, la tuya,

Catedral donde has encerrado emociones y sentimientos.

Tu mente, guardia feroz, para quitarse el miedo,

decidiò que permanezcan allí, encadenados para siempre. 

Amanece, antes de dejar, me vuelvo, 

última mirada.

Esta ciudad, Malaga, nunca mas será la misma en mi.