viernes, 30 de abril de 2021

RELATOS SEMANA 54

Foto autor desconocido


 RELATO 1🥈


Sefarad

Era la puerta de uno de los cármenes más hermosos del Albaicín, antes de que la política genocida de Isabel y Fernando pusiera en jaque a mis antepasados. La llevaron con ellos cuando pudieron fletar un barco, gracias, según nuestra tradición, a un vecino armador llamado Mohamed Alí, y salir por Almuñécar rumbo a Fez en donde tuvieron que rehacer sus truncadas vidas. El desgarro fue tal que aquellos parientes sefardíes lo transmitieron durante generaciones. Aún conservamos esa puerta y su llave, porque jamás perdimos la ilusión de volver a nuestra querida patria Sefarad de la que nunca debimos salir.

RELATO 2

El Tiempo (No) lo Cura Todo

Habían pasado veinte meses. Alberto no imaginó que María ya no le abriría. 
Eran AMIGOS, de esos amigos que saben lo que el otro piensa y siente con tan solo mirarse, de los que coinciden en el sabor del helado, de los que comparten a Fante, Lorca, Tarkovski y el cine de _la 2_, de los que un “te llamo” se convierte en horas de charla y risas compartidas. 
Un día de finales de enero, él decidió marcharse sin despedirse. María no lo entendió y, pasado un tiempo, tampoco necesitó entenderlo. 
Cerró y siguió su camino…

RELATO 3

El escritor bloqueado

Sobre la puerta una nota: 

Encerrada inspiración.
Disculpen los pésimos relatos.

RELATO 4

La puerta de Alí

El pequeño Alí tenía acceso libre por toda la propiedad...menos aquella estancia.

Su paso estaba custodiado por un cancerbero con entrañas de madera y armas de hierro bien forjado.

El paso del tiempo le daba un aspecto ajado, con sus nudos y grietas al descubierto, pero no por ello cedía a cualquier intento de franquear su entrada sin permiso.

Él acababa todos sus juegos de pie ante ella, absorto en su contemplación.
¿ Qué se escondía con tanto celo tras esa puerta?

Alí nunca pudo llegar a saberlo, pero no le importó...su imaginación le dió la llave para entrar.

RELATO 5

TRAS LA PUERTA

- Dicen que aquel que osa tocar la aldaba comienza a sentir un deseo irrefrenable de traspasar la puerta y que ya no vive para otra cosa que no sea intentar entrar al viejo caserón. Dicen que está habitado por un ser extraño, con cuernos de cabra, cola de león y lengua de serpiente, que vive allí desde hace más de trescientos años y que quien traspasa el portón ya no vuelve a salir jamás. Eso dicen.
- ¡ Tonterías! ¡ Voy a llamar!
- Noooooo..
- Toc, toc
-...oooo
 
RELATO 6

SECRETOS DE FAMILIA

¿Abro? ¿O no abro? Entre la curiosidad y el miedo me paralizo en movimiento. Me hago mil preguntas: ¿qué hay detrás de esa vieja puerta? ¿Qué guarda después de tantos años?

Ese fue siempre el secreto de la tía Angelita. “No abráis, que os vais a arrepentir”– decía – inoculando misterio y deseo a la vez.

Tuve que vender la casa tras arreglar los papeles de una laberíntica herencia, llena de extrañas muertes repentinas y desapariciones de familiares. Nunca hubo una explicación aparente.

Dejé el enigma para la compradora y sentí que algo en mi linaje descansaba.



RELATO 7

Mi verdad

Fue tan fácil como quedarse dormido. Antes de que pudiese darme cuenta ya estabas dentro; navegando entre las profundas tonalidades de mi alma. Mi primer error.

No te asustaste por lo que viste, es más, prometiste quedarte para siempre y yo te creí fervientemente. Mi segundo gran error. 

Me abandonaste y en tu huida te llevaste contigo una parte de ella. Ahora, la tengo herida y confinada. 

Por favor, deja de pedirme la llave para liberarla porque no te la daré. Primero tengo que salvarla de esta aflicción.

RELATO 8🏵️

En construcción

Aquel portazo retumbó ante mí como un punto final. Observando tu abandono pude ver el mío, tejido con surcos secos y profundos...

Quise entonces desmontarme para volver a construirme, con la esperanza de encontrar aquellas piezas que siempre sentí que me faltaban. Pero el empuje brutal de un vendaval atroz me hizo rodar sin rumbo, desprotegida, esquivando golpes y espinas. 

De vez en cuando, consigo agarrarme a una flor bien enraizada pero, cuando más a salvo me siento, la suelto para rodar de nuevo, como si mi espíritu no mereciese paz.

¿Tan duro es el camino de la redención?

RELATO 9🥇

Estrías en la memoria

Primero fue árbol libre con rostros en las estrías de su tronco. Después, portón, siempre abierto, mostrando orquídeas en fanales y un patio al fondo presumía de paredes blancas con un pozo rodeado de geranios encendidos de alegría.
Después marcharon, quedó ella. El portón encerró su felicidad, su soledad fue desmemoria. Sus neuronas instaladas en la residencia.
Confundida, golpea la puerta de la sala. Sangra, vienen a curarla.
Tiene una mirada perdida que permanece fija en aquella figura de madera sobre el cerrojo. Manosea la llave en el bolsillo de la bata, no recuerda, no importa si echó el candado.


RELATO 10

GOLPE

Ese golpe seco que hacía temblar mis cristales, que llegaba sin permiso, que aparecía con su rodillo de encanto a enamorarme y marearme.

Que venía a mimar mis calamidades y le daba vida a mi casa y a mi soledad.

Lo que buscaba era solo protegerse del frío y de sus enfermedades al calor de mi mesa camilla y de mis pucheros...

Pronto me hizo ver "la perla" que llevaba dentro. Ya me lo había soplado el levante y el chiflar de mis árboles...

Tú, "cariño mío", siempre encontrarás mi puerta "abierta".

Desgraciado...

RELATO 11🥉

LA LATA DE GALLETAS

Tras llamarme el abogado y entregarme el testamento, me dirigí a las montañas de Huesca para volver, después de cincuenta años, a casa de mi abuela.

Introduje la llave en la cerradura, crujieron los goznes, la puerta se abrió. Un olor húmedo y acre inundó mi pituitaria. 

Siempre sentí curiosidad por el desván, sospechaba que escondía algo, así que fue lo primero que inspeccioné. Ya nadie lo impedía. 

Acerté: una oxidada lata de galletas cobijaba decenas de cartas de amor, cuyo remitente era el primer novio de mi abuela.

Ahora entiendo por qué soy la única pelirroja de la familia.

RELATO 12🏵️

OTRA VERSIÓN

_"Y sabed, padre, que ni ese cerrojo ni otros mil que pongáis, lograrán jamás separarme de él._

_Que si no puede ser en cuerpo, será en alma, pues para mí nunca habrá otro más que ese valiente Hidalgo al que despreciáis._

_Que aunque su figura es triste y su fortuna escasa, le sobran gallardía y delicadeza por igual._

_Que lo que vos llamáis locura, no es otra cosa sino pasión._

_Que mi existencia será con él o no será."_



RELATO 13

Vivir de los presentes.

Y ese día, cansado del hastío, decidí encerrarla en un rincón de mi cabeza, esconder la llave y olvidar.
Cerré la puerta sin dejar rastro de lo que allí dentro quedaba.
Después pasó el tiempo, paseando por mis recuerdos, encontré la puerta.
Una fuerza interna quería abrirla y otra parte luchaba por dejarla como estaba.
Mi curiosidad pudo conmigo, entré.
La encontré a ella, sonrió, había escrito las paredes con nuestros mejores momentos, había colgado fotos en las ventanas de los amaneceres y atardeceres que pasamos juntos, había pintado el techo como una noche estrellada.
Ahora es donde quiero vivir.

RELATO 14

Reflejos

La puerta era de madera de roble, de antiguas traviesas de la vía Avilés-Gijón, de raíces carboneras. 

Antes de la llegada del vapor, la línea tenía tracción animal, y se cambiaban continuamente.

Al poco de nacer Jacinta, su padre las usó para cerrar su hogar, cambiando la puerta original de tablones irregulares, que había fabricado su abuelo con mucho amor pero poco esmero.
Supo qué hacer con ella cuando el jefe de obra preguntó. 
Y ahora se miraba en ese hermoso espejo que no solo reflejaba su figura. 
Veía en él a su padre y a su abuelo.

RELATO 15

ALHAMAL

Tras esa puerta la vida se sigue gestando.

Si bien los altos muros no permiten a nadie entrar ni salir, la lluvia y el sol inundan el patio animado por el canto de los pájaros y el zumbido de los insectos que anidan en su escasa vegetación.

Zinab cuida con esmero el huerto que les alimenta y mantiene vivo el recuerdo de los campos en los que jugaba en libertad. Añora su infancia inacabada y aún maldice el día en que su padre la vendió, pero en su vientre crece la esperanza.

RELATO 16

Solo era humo esa puerta

“Ni aunque tengas las llaves podrás abrirla”. Esa voz resonaba en su cabeza.
Cogió cada palabra, las retorció, las rompió en mil papelitos y las tiró en la papelera de: “Yo, soy yo”.
Los quemó.
Venció; la puerta cerrada se evaporó. Era libre, sin tapujos, sin prejuicios.

martes, 20 de abril de 2021

RELATOS SEMANA 53

 

Foto: Juan Cruz Ciambotti.


RELATO 1🥈


LA NEGRA TOMASA

Salía de la fábrica de tabaco, cigarro puro en mano, y la negra Tomasa lo esperaba en el bohío, siempre con una sonrisa y un pucherito de café.

-¡Ay, mi negra! Te comía hasta la _raspita_ –le gritaba burlón.

Ella correspondía con un guiño y un meneo sabrosón.

Luego se sentaban bajo el limonero y se contaban sus cosas del día.

-En el _mercao_ me saqué unos pesos _pa’l_ mañana –comentaba satisfecha.

Hoy es mañana y, en la sala de urgencias mientras espera, ve acercarse discreto al doctor y piensa: “¡Ay de mí! Si te vas, llévame contigo, mi negra”.

RELATO 2

—EL SABOR DEL SON—

Romualdo, ágil, ardiente, apuesto, se entregaba al Son en noches regadas de besos y daiquirí. Evelina irrumpía con la sensualidad innata de habanera vieja, tarareaba la letra al danzar.
1,2,3, ...4,5,6 pies, caderas, ... y... giro ...
—¡Ay mi amol, puritita magia caribeña!
Se conocieron, se bailaron, se amaron, se disfrutaron, se llenaron de salsa la vida.
Un día, Evelina enfermó.
Ahora, Romualdo, con su soliloquio, sobrado de soledad, pone a Evelina en manos de la santera. Lleva un hatillo de bella seda, cosido por ella misma con un aluvión de abrazos, de sexo, de Son.
Mientras, espera confiado su salvación.

RELATO 3

El arte del sabor

Aquí estoy viendo la vida pasar. No hay prisa ya. Mientras fumo un suave y dulce Lancero veo a las mujeres hermosas pasar.

Aunque sea viejo, todavía tengo el fuego en el cuerpo y me siento como un tocoroco con plumas bellas y brillantes. 

La música llega desde la barra de enfrente y veo al ambientoso bailar con todas.

En breve esa bola llegará a su hembrota y se las va a hacer pagar. Ese es de los míos, también le gusta la candela. Una sonrisa cruza mi cara, allí llega Caridad moviéndose a ritmo de Son. 

¿Bailamos?


RELATO 4🏵️

TRASMISIÓN

Hay personas muy necesitadas de contar grandes secretos. Resulta mucho más fácil contárselos a un desconocido que no los va a juzgar. 
¡Es tan gratificante observar con qué ligereza se marchan quienes han descargado su corazón del peso de la culpa, el remordimiento o la vergüenza!, sus pies parecen bailar sobre el asfalto. 
Entonces me fumo un cigarro y, con las volutas de humo que salen de mi vieja boca, se desvanece el recuerdo de lo confesado.
- Ven, siéntate, seguro que tú también tienes algo que
contarme. Relájate, fluye… Soy oidor profesional y te
escucho por un módico precio…


RELATO 5

ODIO 1 - EMPATÍA 0

Se sienta todos los días a esperar, lleva un sombrero, porque él es un caballero, una chaqueta que ha visto días menores, el broche de Paula y un puro que enciende y apaga para estirarlo.

Le guardan la cola para que se pueda sentar, no aguanta de pie mucho tiempo, las piernas flaquean ya.

Los "mantenidos", los "subvencionados" van avanzando hasta que llega su turno, una bolsa con poco más que lo esencial para subsistir, y mucho pudor por la caridad recibida.
Le avisan, ha llegado su turno.

Siéntate en su silla y ponte por un momento en su lugar.


RELATO 6

Las sensaciones del pasado son el presente.

Pensó: “Necesito paz en mi cuerpo y mi mente”. 
Anhelaba esa tranquilidad y serenidad que en años pasados le brindaba el ambiente de su vida familiar. 
No deseaba nada más.
Tomó su maleta y se despidió de aquel lugar que tanta ruindad y dolor le había ocasionado al alejarse de todo.
Decidió coger el autobús, volver a casa.
El sueño pudo con su cansancio, olor a tierra mojada, césped recién cortado, sol resplandeciente. 
Temía precipitarse al vacío.
Con esa sensación, se despertó en la silla de aquella sala donde esperaba las cenizas de su amada esposa.
Llegó tarde otra vez.

RELATO 7

Genio y Figura

El viejo Anselmo es todo un símbolo en el barrio. 
A la hora que pases, siempre lo encontrarás sentado en su esquina y de punta en blanco: traje, zapatos relucientes, sombrero y un puro entre sus dedos. 

Para todo aquel que quiera escucharlo tiene historias que contar.
Ha tenido una vida rocambolesca: cortador de caña, empaquetador de puros, balsero, estraperlista...

Pero su pasión fue bailar.
En cualquier reunión de improvisada orquesta ahí estaba él, con su aspecto impecable, dando sus meneítos salseros.

Ahora sus piernas ya no le obedecen, pero el son cubano sigue corriendo por sus venas.


RELATO 8

Mi adorada _Flaca_ :

De nuevo, te escribo para decirte que sigo esperando noticias, que te añoro y extraño cada día.

Me mantienen vivo el recuerdo de tus besos y el deseo en tu mirada y tu cuerpo pegado al mío en esa danza amorosa y sensual que nos convirtió en figuras del ballet nacional. Durante años y con tu ausencia, me mantuve dando clases de baile en la calle. La gente me reconocía y me pagaban bien.

Ahora sólo quiero irme contigo allá donde estés. Dame una señal; la vida sin ti es una pieza desafinada.

Siempre tuyo, 

tu _Negro_


RELATO 9🏵️

LA ESPERA

Vestía la misma ropa que aquel día, no el mismo modelo sino la misma. Seguía conservando la misma elegancia de entonces, los zapatos impolutos, la ropa limpia y planchada y, cómo no, su corbata.

Le encontré sentado en la misma banqueta donde le dejé, con el broche que le regalé en la solapa.

Cuando pasé frente a él levantó la mirada y dando una profunda calada a su puro, con su voz ronca y pausada me dijo: " Sabía que volverías, te estaba esperando" , pasó su brazo sobre mis hombros y el tiempo sin él se redujo a un solo instante.

RELATO 10

Sillas

En 1931 Nathaniel Alexander de Lynchburg, Virginia, patentó una silla plegable. La diseñó para usar en escuelas, iglesias y auditorios. 

Él la usaba para sentarse a esperar a Clarise mientras compraba en el "General Store". Fumaba un cigarro y charlaba con los trabajadores que salían de la destilería Jack Daniels.
 
En 1963 compró una silla para ella, pues ya se cansaba al andar. Era negra y de un nuevo material llamado "plástico".

Durante una década vieron pasar la vida, sentados uno al lado del otro, cogidos de la mano.

Tras su marcha mantenía la silla negra vacía a su lado.

RELATO 11

EN SU ESQUINITA

_"La violencia ocupa las calles..."_
_"Los Estados presionan..."_
_"Comienzan las negociaciones..."_
_"Los enfrentamientos continúan..."_

_"La epidemia es incontrolable..."_
_"Las autoridades advierten..."_
_"La desocupación comienza a ser una razón para la depresión..."_

Ajeno al "hundimiento", en su esquinita, él es feliz con su sombrero, sus dos trajes desgastados y su par de zapatos. Con su madurez y cultura, sigue seduciendo y enamorando a hombres y mujeres por igual.

RELATO 12

SARA DE SAINTES MARIES DE LA MER

Desde que supieron que el niño de la Sonia venía sin mano, llevaron flores cada mes a Sara, en Saintes Maries de la Mer. 
Las colocaron en la cueva de su santa negra, junto a una manita de cera, entre mil velas. 

Ha llegado la hora, la Sonia ha roto aguas. Juan, el patriarca, echa un puro a las afueras de la maternidad mientras aguardan, rezando bajito. 

-- Ya está aquí el niño -- grita la Paca desde la puerta --¡Y viene entero! -- 

Corrillo de palmas, manos al cielo. Los payos los miran. Celebran con alegría y bailes al niño completo.

RELATO 13🥉

Danzón triste del poeta de la Habana Vieja.

Cada día obligo a mi viejo cuerpo a alzarse de la cama, y a mi dignidad a acicalarse con los vestigios de otro tiempo... Entre ellos estuvo Lupe, mi hembrota trigueña que se embalsó sin decirme nada ni mirar atrás; estuvieron mis dedos acariciando las cuerdas de un contrabajo, lo único mío que tuve; estuvieron mis noches maleconas vagando sin rumbo, ajumado por el ron que nada borra...

Si supieran cómo llora mi alma derramando sobre el papel versos etílicos, que luego esparzo sobre sus mesas esperando obtener un valor que nunca es justo...

¿El puro? De contrabando, mi hermano.

RELATO 14

El mundo del abuelo

Todos las mañanas colocaba un libro, la alfombra y una silla a su lado.    
                                         
Miraba, como si no me viera.
Fumaba. Se aislaba en “su mundo”. Sus tristes ojos iban a sitios ignotos . Hablaba a la silla vacía:

— Viajé sobre nubes, colgué de un rayo de Sol, me hundí en el Caribe.
Compré el sombrero en Panama. Te traje un libro de recetas de Francia.
No te enfades, la alfombra es un avión seguro. 
Cata, “ mi negra”, bailemos una guajira.   
 
Al atardecer nos íbamos al cementerio. Él ponía una velita en la tumba de mi abuela Cata.


RELATO 15

Mi reina

¿Qué voy a hacer ahora que te has ido? Un amanecer sin ti es inconcebible, una cama medio ocupada me espanta. 

Tú mejor que nadie sabes que siempre me has guiado, aunque acabo de descubrir que hay algo de lo que puedo sentirme orgulloso y es haber compartido mi vida contigo. 

Llevo el broche que te regalé en nuestro primer aniversario. No me queda ni la mitad de bien que a ti, pero necesitaba respirar tu aroma. Especialmente hoy.

Hasta pronto, mi reina.

RELATO 16

Compay Segundo

¿Adónde habrán ido mi "negra" y mi compadre? 

Son las seis de la tarde, tenemos que tocar en la sala de la Unión y no aparecen. Espero que no se hayan vuelto a emborrachar en la tasquita de El Cebolla. 

Tanto querencia por el ron me va a dar un disgusto cualquier día..., espero que no sea hoy... Y no quiero ni pensar que con la humera se calienten y me adornen la frente. ¡Sería el colmo, compadre! 

¡Ay, virgen de los negros, lo que hay que hacer para comer!, ¡que bueno está este purito que me dio Compay Segundo!



RELATO 17🥇

BOFETADA DE REALIDAD

Estoy abrumado... ¿Cómo no me di cuenta de que el tiempo dejaba su huella en mí?... ¡Apenas he cambiado! Aseado, perfumado, camisa, corbata, americana, Panamá y zapatos bien lustrados de toda la vida. Uso la misma talla que con 30 años y mi puro habano siempre me acompaña... ¡Sigo siendo el mismo! Soy yo, el rey del guaguancó, me dicen Mister pachanga y las mujeres se me rifan.

Cuando aquella muchacha se levantó a mi llegada pensé que quería un autógrafo... Pero me dijo sonriendo _"siéntese usted señor"_ y me dejó tan ensimismado que hasta perdí la guagua.




RELATO 18

DE JINETERAS Y LADRONES

Paquillo “el Guajiro” siempre cantaba la misma canción para que los guiris le soltaran alguna moneda en el paseo de La Carihuela.

Por la noche se lo gastaba en ron barato y puros.

Un auténtico buscavidas. Me flipaban sus historias de cuando creció en aquel bloque en ruinas lleno de jineteras y ladrones, de los maricas del malecón, de las noches La Habana.

Contaba que llegó a Málaga en el 59 con Hemingway, vete tú a saber…

A veces cuando paso por su esquina le dejo algo de tabaco, o una botella de Bacardí, por si le da por volver.


RELATO 19

MIRE QUE LE DIGA.

Nos quitaron nuestros nombres para ponernos los de sus Santos. No se podía desear a la mujer del prójimo, mientras las muestras parian mulatos.

Nos llamaron "hombres de color" para no mencionar el nuestro. "Afroamericanos" para decirnos que no somos de acá, que se dice "aquí", nos enseñaron.

Cuando pienso negro, siento el dolor del pasado, la lucha del presente y la esperanza en el futuro. 

Cuando digo negra, veo el color de la carne y la felicidad del amor.

viernes, 16 de abril de 2021

RELATOS SEMANA 52

Foto: "Sun bathers at the lido". Autor: Edward George Malindine


 RELATO 1🥈


AGRAZIADOS


El fotoperiodista viajaba en avioneta cuando, al atravesar la cordillera que conduce a Graz, divisó 

unos cuerpos amontonados y semidesnudos sobre la pasarela del río Mura. Quiso hacer fotografías para documentar aquel horror, pero el zoom de la cámara no alcanzaba el detalle. No parecía que hubiera sangre; llevarían muertos días – pensó - y el calor la habría borrado.


Mandó un SOS para alertar de la situación a la comandancia, que se apresuró a ir al lugar y cuya reacción fue de completa estupefacción: “los estudiantes de Bellas Artes estaban celebrando su graduación”. Mientras, retozaban su belleza al sol.


RELATO 2


Cosmo/azar


Cuerpos que hablan por sí mismos de la alegría de vivir; que agradecen como amantes las caricias del Sol; cuerpos que sienten; que se reproducen; pedazos de espacio articulados como complejísimas estructuras de materia viva destinados ¡ay! a la muerte... Cuerpos que se pudren y estercolan, ¿para posibilitar la existencia de otros cuerpos?; cuerpos que persisten como energía indestructible, como formando parte de un Cosmos; de una totalidad ordenada que interrelaciona sus cuerpos con ese hilo invisible que llaman "amor"... y que se separan con ese otro llamado "odio". ¿Cuerpos diseñados por un hacedor universal o por el imcomprensible azar ?


RELATO 3🥇


DESDE ARRIBA


Cada domingo observaba a aquel grupo de jóvenes mientras jugaba a inventar nombres e historias sobre ellos. 


En mi ficción, Alfonso era novio de Encarni, pese a que ella sólo tenía ojos para Miguel. 

Miguel suspiraba por Pilar, que únicamente estaba enamorada de sí misma... 


Pero al que bauticé como "Pedro", sólo pude fabricarle historias junto a mí; sus delicadas facciones y maneras me tenían seducido hasta la obsesión. 


Aquel día despareció de pronto, así que decidí marcharme antes de tiempo. 

Al girarme lo encontré justo frente a mí. 

_-He decidido dejar de mirarte desde abajo_ -me dijo sin más


RELATO 4


La rebeldía de mi abuela


Mi abuela siempre fue una transgresora con las formalidades de su época.


Yo creo que me parezco mucho a ella. No me gusta plegarme a los convencionalismos existentes.


Ella siempre me animaba a explorar otros caminos y a dejarme llevar por mi propio instinto.


De joven tenía una pandilla en la que siempre destacaba por ir contracorriente.


Siempre me contaba la anécdota de aquel día que se reunieron para tomar el sol y ella, en vez de bañador, se compró uno de los primeros bikinis.


Ese punto de rebeldía siempre fue su seña de identidad y la hacía particularmente interesante.


RELATO 5


EL BALNEARIO


Las olas rompen en el malecón dando alcance a un grupo de jóvenes que toman baños de sol. Risas doradas. 

Un gran salón. Un grupo de hombres grises planean el derribo del Balneario. 


Desde sus tumbonas, organizan un guateque. Hanna traerá su Pick-up. Sándwiches de pollo, refrescos.

                            

El nuevo club social privado procurará grandes ingresos. 


Carteles de derribo empapelan el Balneario. Llantos.

          

Las excavadoras avanzan. 


Organizan una alfombra humana que detiene el avance de las máquinas.

                        

Estupefactos, observan al grupo de jóvenes que impide el derribo. 


Aplausos, risas y abrazos. 


No habrá club social. 


Sigue en pie su lugar favorito.


RELATO 6


La cadena de montaje era un trabajo duro de cojones, en invierno el frio se te metía en los huesos y te dolían las manos de apretar tornillos y tuercas sin descanso.


Todos esperábamos la llegada del verano, y entonces, cuando sonaba la sirena y la cinta se paraba, corríamos hasta la orilla del lago y nos quedábamos en el traje de baño que llevábamos bajo el mono de trabajo.


Solo de ver a las chicas de la oficina en bikini se nos olvidaban todos los males. Rock sonando en la radio, cerveza… no teníamos más remedio que ser felices.


RELATO 7🥉


RECUERDOS SIN MEMORIA


Recuerdo esos veranos en casa de mi abuela. Nunca supe cuántos primos éramos: primero venían unos, otros llegaban después, algunos se iban, luego volvían más… Sólo mis hermanos y yo, sin mis padres, permanecíamos los tres meses de vacaciones; el resto del año estábamos internos.


Recuerdo esa casa solariega con la escalera de piedra de media luna que desembocaba en la playa, La  Nivea  llena de arena, comidas en la terraza cubierta de buganvillas, risas infantiles, meriendas con olas, cenas con luciérnagas y estrellas…


Suerte que, aunque mi memoria se deteriora, conservo los más bellos recuerdos del pasado.


RELATO 8


Nos llamaban los “20 magníficos“


Podíamos con todo , menos con los contratos larguísimos que al final quedaban amontonados en las mesas...


El olor a tinta y el humo del cigarrillo se escapaba por toda la oficina . 


Así pasábamos la semana. 

De café en café y tecleando a la velocidad de la luz para tenerlo todo a punto , antes de la hora de salida.

Nos dejábamos la piel trabajando, pero cuando llegaba la hora bajábamos todos juntos.

Nos quitábamos los uniformes y nos echábamos a tomar el sol con el maletín a cuestas, sí, pero satisfechos. 


-¡Ay hija ! que felices éramos con tan poco.


RELATO 9🏵️


Robinsoneando


Encontré un trabajo fantástico en una isla desierta. Vivía en compañía de monos, peces, pájaros y vida salvaje.


Cuidar del medioambiente, echar un vistazo e informar de la fauna, era mi función.

Iba libre, desnudo, tomaba el sol en un tablado de madera.

Una mañana, venía yo tranquilamente nadando entre delfines y al salir del agua en mi plataforma toqué algo...un pie...¿Qué era aquello? Pensé.

—¡Oye..corre, ponte ahí!—me gritó uno, un fotógrafo.

Había un montón de personas realizando un experimento de model art...

Yo soy ese último, al fondo, escondido detrás del que tapa mis carnestolendas.


RELATO 10


ARMAS DE MUJER


Sí, yo soy la del bañador oscuro.

Cómo recuerdo aquel día mirándolo embelesada.

Mi compañera tenía un imán irresistible para el género contrario y caían todos como moscas. Entonces, se me ocurrió, llené un cubito con agua y lo bañé.


Eso fue una algarabía, claro está, no le cayó solo a él. Se lió y acabamos todos en el agua.

En ese impás, me colgué de su cuello diciéndole: -" ¡Agárrame, que no sé nadar!”, total, entre ahogadillas y brazadas, transcurrió el verano.


Esta otra foto es de nuestra boda, sí hija, al final todas tenemos algún arma escondida.


RELATO 11


EN VERANO


Nuestra mente era más estrecha y pudorosa que nuestros cuerpos limpios y semidesnudos mostrándose a los otros. Las miradas eran furtivas y cargadas de pecado.


El camino de vuelta a casa era lento y tortuoso bajo el sol abrasador de la tarde, tras él ejercicio y los juegos en la piscina. Nadar agota después de haber nadado.

  

Al oscurecer el día, nos iríamos a la fiesta y bailariamos tocando quizá, aquel cuerpo, ahora bien vestido, tan bello y deseado en la piscina. Su pelo ya no olía a cloro y era suave, perfumado de brisa de noche de verano.


RELATO 12


Inocencia


Abro el álbum de fotos de mi madre 

con mi pequeño hijo en mis piernas.

Le señalo la fotografía que se tomó el día que se conocieron, mi padre y ella. 

Pensé que me iba a decir: 

“Qué guapos, qué jóvenes estaban los abuelitos” o cualquier otra cosa.

Pero solo me dijo:

— Les pusieron alguna multa o los detuvieron. 

— No hijito. ¿Porqué? 

— Mama, ¿Eres tonta?, no ves que hay mucha gente juntas y sin mascarillas.

Pensé:

“Oh, que tiempos aquellos en los que se podía compartir libremente sin virus”


RELATO 13🏵️


In fraganti


Los veraneos en el pueblo de la sierra eran la reválida anual de una complicidad tejida desde nuestra más tierna infancia.


Allí nos liberábamos de responsabilidades y de las estrictas normas de las familias pudientes a las que pertenecíamos.


De haber sabido que ese día junto al río, Merche se tumbaría a mi lado llevando un atrevido bikini sobre su cuerpo perfecto, jamás me habría puesto aquel ridículo bañador. 


Aunque no fui el único que evidenciaba una creciente turbación carnal, lo que me convirtió en blanco de sucesivos cachondeos veraniegos fue, además, mirar a la cámara con cara de besugo.


RELATO 14🏵️


SÓLO FUE AQUÉL VERANO


No éramos dos cuerpos sin forma, aunque tu forma de decirme que dejara de hacerte reír me retaba a contarte las historias más desternillantes de mi vida.

Entre tantos cuerpos, risas y ecos, tú brillabas en mis retinas.

En el camino de vuelta de aquel lago, nos cogímos de la mano, en silencio nos miramos y no había una imagen más bucólica y cursi.

No comimos perdices ni fuimos felices juntos.

Sólo fue aquél verano.


RELATO 15

Eso fue lo que pasó


Los relatos de Ernest se sustentaban sobre cortos diálogos que creaban un suspense invisible. Como una marea humana de cuerpos semidesnudos que ocultan historias sórdidas, dramas y comedias, como si lo que sucediera estuviera oculto realmente, por debajo de la realidad. La punta de un iceberg que ocultaba la mayor parte de su materia bajo el agua.

Hemingway me decía: "Paul, no hagas dramas, mejor escríbelos". 

Pero era difícil sacar toda la podredumbre. 

Imaginando esas vidas quedabas vacío y querías desaparecer.

Y eso fue lo que a él le pasó.


RELATO 16

Contracorriente


Aquel verano olía a sexo. Mi piel emanaba lujuria en dosis desproporcionadas. No me quedaba más opción que contenerla, especialmente en público. 


Aprendí a desear en secreto y a soñar estando despierto.  


Ese día en que la piscina municipal no abrió, descubrí que habían más personas como yo. Algunos eran expertos en disfrazar sus miradas lascivas; otros, simplemente, vivían el presente.


Cuánto anhelaba hacer lo mismo. Integrarme en ese grupito de chicos que claramente se compenetraba de una forma especial. 


Me tranquilizó saber que no sería el primero, ni tampoco el último en ceder ante los deseos de la carne.


RELATO 17


Las vistas desde mi cuarto.


Al amanecer la despertó el runrun que acompañaba a aquella manada de jovenes en la playa, que veía desde su cama.

Desde el ático acristalado tenía una perspectiva privilegiada del bello joven del que estaba locamente enamorada.

Amontonados como abejas en una colmena, con todas aquellas mujeres, que celos, pero él me miraba.

Que sí, que sí, aquí estoy en mi prisión, cuando salga y lo conozca le tendré reservado mi mejor beso, mi mejor sonrisa, y por qué no, también mi mejor lencería.

Tanta fiesta, no sabía qué solución iban a darle al asunto, joder.

Grité:.

¡¡¡Poneros las mascarillas.!!!


RELATO 18


HACERSE EL AGOSTO


- Cariño, me voy para la playa. ¿Me acompañas?


_- No bombón, prefiero quedarme en casa porque hace demasiado calor. Pórtate bien..._


               _(Saliendo de casa_) 


- Como quieras, cariño... No creo que venga a comer, volveré sobre las seis o las siete más o menos...


_Hoy repartiré mi Encanto personal... Iré directamente a la playa del Malecón._


             _(Llegando a la playa)_


_¡Ahí va, la playa está que no cabe ni un alfiler, qué maravilla! Está como a mí me gusta. Hoy va a ser un buen día_... 


- ¡¡¡Llevo la _coca cola_, oigaaaa!!!

- ¡¡¡Bombón helado!!!

- ¡¡¡Agüita fresquita también llevo, oigaaaa!!!

viernes, 9 de abril de 2021

RELATOS SEMANA 51

Foto: Poema "Barely the day started". Autora Veronika Robinson

 RELATO 1🥇


¿Cuestión de zapatos?


Tantos años oyendo la misma línea de reproche, “¡ponte en mis zapatos!”. Y tantas veces haciéndolo, a pesar de no sentir la necesidad.


Íbamos en el coche y volvió a recurrir a la misma estrategia; hacerse la víctima y exigirme que me pusiese en sus puñeteros zapatos. 


Le pedí que detuviese el coche, bajé, me desabroché mis converse y me las quité. Su semblante enmudeció por completo. 


“Ahora ponte tú en mis zapatos, ahí los tienes. Yo no los necesito porque soy una mujer L-I-B-R-E”.


Volví mi espalda a él y seguí mi camino sin mirar atrás.

RELATO 2


"Siempre intento olvidarte y te vuelvo a encontrar"


Y se fue, dejando sus zapatillas atrás. 

Noche tras noche la extraño, la amé cada segundo y después la odié como a nadie.

En lo absurdo de este loco amor, me siento más vivo, inmerso en el firmamento de los olvidados.

Acostado en mi cama, las sábanas queman mi piel, mi cabeza da vueltas.

No quiero pensar más en el ayer, los recuerdos vuelven a mi.

El abismo abrió mi alma, lo dividió en dos, me llevó desde el infierno al cielo de los que no tienen nada.

Es injusta, malvada, arrogante ... 

¿Cómo pude enamorarme de ti? 

¿Cómo pude olvidarte?


RELATO 3


MATERIA


Adoro descubrir paisajes desconocidos. Despiertan en mí una sensación de libertad inigualable. Tengo la suerte de formar parte de esta inmensidad, y no puedo más que agradecer esta oportunidad.


Camino sintiendo la brisa acariciarme y me impregno de los colores de la naturaleza que me rodea.


Me desprendo lentamente de todo cuanto tengo, de todo lo que se adhiere a mi piel, de cualquier pensamiento y sólo quiero sentir.


No tengo miedo a la vida ni a la muerte, porque simplemente soy el vehículo que ha elegido la _materia_ para tener conciencia de sí misma y de su belleza.

RELATO 4🥈


20 PRIMAVERAS


De pequeña os adopté y adoré. Con vosotras crecí e incluso volé.

Me columpié, trepé a los árboles, escalé rocas, monté en bici, en monopatín, corrí, salté y coseché grandes éxitos en mi equipo de baloncesto...

Os coleccioné en los colores del arco iris, os llevé con shorts, pantalones o minifaldas. Bailé locamente, os mojé, os llené de arena y de barro... Juntas hemos recorrido un largo camino y vivido mil aventuras. Pasé frío en invierno, calor en verano sin separarme de vosotras pero ya soy mayor de edad, me duelen los pies y... ¡Ahí os quedáis queridas _"Converse All*Star"!_

RELATO 5


EL PRIMER DÍA DEL RESTO DE MIS DÍAS


Resulta difícil empezar de cero, pero a veces no hay más remedio.


No hacía falta que ni la familia ni los amigos me dijeran que lo dejara, yo era consciente de sus engaños y tejemanejes. No era tonta, pero sí una ciega locamente enamorada, como decía mi madre. Sabía que sólo mis perros me eran fieles.


Agotado el cupo de sufrimiento después de más de veinte años de mentiras, mi madre me ayudó a planearlo todo. Ya no se burlaría más de mí.


Hoy comienzo una nueva vida junto a _Menta_ y _Canela_. Nunca es tarde para empezar de cero.

RELATO 6


Caminos escritos con letras de sueños


No miró hacia atrás.

Sus descalzos pies, flotaban sobre nubes; creando senderos ingrávidos,que se hundían en un horizonte incierto. 


Buscaba un futuro, en un camino escrito con letras de sueños perdidos, en un laberinto.


Sin rumbo, extraviada en las entretelas de un incierto y peligroso viaje.                              


Herida, agotada, sedienta...se entregó a los fríos brazos del mar. La depósito en las doradas

arenas de un lugar acogedor.

Manos bondadosas la ayudaron.


Dejó sus viejas botas, enlodadas, en la guerra con sangre, violencia y tortura,

en el mismo sitio que dejó y se desató de su pasado.


RELATO 7🏵️


La abducción de Cris


Las instrucciones habían sido precisas, solo tenía que seguirlas. 


Suerte que el asfalto no quemaba en aquella época del año. De hacerlo, me habría resultado imposible caminar sobre él durante los dos kilómetros que me separaban del lugar acordado.


Mientras llegaba, pensaba en las cosas bonitas que echaría de menos: el olor perfumado de mamá, las rosquillas de la abuela, la mirada cómplice de papá cuando me metía en algún lío adolescente...


En mis zapatillas encontrarían la nota:


He sido elegida, junto con otros muchos, para crear un mundo mejor lejos de éste. Pronto contactaré con vosotros. Os quiero. Cris.

RELATO 8


DESNUDARSE


¡Ahí os quedáis!

No puede ser que cada paso me duela.

Tenemos que caminar juntos.

El camino es largo.

Y sólo estamos nosotros para hacerlo llevadero.

Os creéis “All Stars” pero que sepáis que sois del montón.

Sólo destacáis porque para algunos la moda marca tendencias.

Pero eso no os diferencia de los demás.

Diferente sería si todo el mundo quisiera caminar con vosotras.

Pero yo no quiero.

Así que no sé si nos volveremos a ver.

Os deseo lo mejor.

Y espero que encontréis la horma de vuestro zapato.


RELATO 9🏵️


EL OBJETIVO


Con quince años supe por mi abuela que había sido el único embarazo de mi madre que había llegado a término tras dos abortos y tres fecundaciones in vitro. 

Mi madre jueza, mi padre abogado, fui un objetivo. 

Crecí entre objetivos.

Objetivo idiomas, 

objetivo deporte, 

objetivo música... 

Jugar con amigos y mancharme de barro no entraba entre sus objetivos. Ni enamorarme. 

Conocí a Dean cuando preparaba el IELTS de Cambrigde. Estalló la guerra en casa.

Con el sobresaliente en mano abordé a mis padres en el té de las cinco. Dean  esperaba fuera. 


-- Tomad vuestro objetivo, ahora cumpliré los míos.


RELATO 10


Hormas blandas


Dejar esas zapatillas y seguir mi camino, para convertirme en adulta. 

He focalizado la imagen mientras bailaba y cantaba gritando, o dormía a la intemperie bajo un claro de luna. Mi cuerpo cumplía años pero mi mente seguía llevando zapatillas.

He estudiado en la universidad, viajado por Europa, trabajado, he tenido hijos y los he criado responsablemente, pero las hormas duras y cerradas me dan grima.

Y ayer, cuando recogía a mi hija y sus amigas y bailaba con ellas a grito "pelao" mientras conducía, he visualizado la imagen de nuevo, pero esta vez he vuelto a por mis zapatillas.


RELATO 11🥉


EL PASO DE LAS GRULLAS


Habíamos caminado veredas y puentes, asfalto y sendas rumbo a ningún sitio.


Nuestra piel, ajada por el sol, la lluvia y el viento, se cuarteaba. El paso del tiempo nos va dejando huellas.


Cuantos lugares visitados y memorias construidas, cuanto camino andado que no se pisará con los mismos pies.


Así, sin volver la vista atrás nos dejó, siguiendo el paso de las grullas, leales a su sino, migrando a lugares más cálidos.


RELATO 12🥉


De Camino a Ninguna Parte


Salí corriendo de casa con lo puesto y sin mirar atrás.

En mi mente se agolpaban las imágenes de tantas vejaciones y abusos...ese fue el punto de partida para mi huída.


Había aguantado durante mucho tiempo... siempre esperando en vano un atisbo de cariño y comprensión.


Durante horas corrí hasta verme bien lejos de la ciudad.

Y así me encontré caminando por una carretera desierta con la única compañía de los pájaros en el cielo.


Quería sentir la libertad literalmente, así que, me descalcé de mis All Star y dejé que mis pies desnudos me llevaran a ninguna parte.


RELATO 13


¡CORRE!


El calor y esos malditos zapatos me estaban matando. 


Los excesos de la noche anterior y aquellas prometedoras caderas, hicieron que me uniera a esos indigentes mentales en su odisea a ninguna parte, en su _"búsqueda del sentido de la vida"._


Uno de ellos abandonó sus zapatillas sobre el asfalto; "ritual de renuncia" lo llamaban ellos. Para mí, sin embargo, fue una revelación. 


Cuando comprobé que aquellas _All Star_ eran de mi número, nada pudo frenarme en la carrera hasta casa de mi madre, ni siquiera los chillidos de... María Jesús, creo que se llamaba.


_¡Forrest!, ¡Forrest!_- gritaba la idiota.


RELATO 14🥈


EL VIAJE DE ALBA


Comenzó a dar sus primeros pasos y a sentir su autonomía. Se rió a carcajadas. 


La vida fue separando a Alba del contacto con la tierra: le puso zapatos para que se sintiera segura. Más tarde, se pasó a las deportivas porque tocaba.

Por exigencia de la norma, se separó aún más de la tierra y de su sabiduria: se calzó tacones. 


Con el paso del tiempo, bajó de las alturas y buscó la comodidad en las zapatillas.

Escuchó su interior, se descalzó y tomó tierra para volver a ser ella misma y reir a carcajadas.


Comienza el viaje.


RELATO 15


MIS ALL START


En mi adolescencia, siempre llevaba unas All Star. Me acompañaban en todas mis aventuras y desventuras. El día en que las dejé atrás, comenzó mi vida adulta. Viendo todo lo que he vivido, algunas veces soñaría con volver a sentirlas en mis pies, revivir la alegría, el ímpetu, la inconsciencia de aquella etapa. No sé qué calzarme ahora... Para seguir.


RELATO 16


Agur


Aunque asumimos nuestro destino y condición de abadono, nos gustaría recordarte, con agradecimiento, los caminos que recorrimos y las aventuras vividas. Acuérdate: juntas subimos las altas montañas con sus picos nevados y sus refugios para senderistas; juntas recorrimos kilómetros y kilómetros de limpias arenas acariciadas por mares y océanos..., y grandes ciudades, ¿te acuerdas?: New York, París, Roma, Praga, Madrid...; juntas caminamos por el lecho de riachuelos de cristalinas aguas... Y ahora nos abandonas sobre este asfalto caliente y emprendes tu fuga con el horizonte como perspectiva... Pues que seas muy feliz, Alejandra, tanto como nosotras lo fuimos contigo. ¡Agur!

RELATO 17🥉


VOLVERÉ A POR TÍ PROBABLEMENTE


_"Aléjate el tiempo que necesites y después volvemos como amigos, que te quiero y me gustas mucho"_ ...me dijiste. 


_"Tú no puedes ser mi novio y yo no puedo ser tu amiga"_ ...te dije.


Así que me fui de tu vida, esperando día tras día que intentaras recuperarme, que de pronto fueras consciente de lo que habías perdido.


Pero la vida es caprichosa a veces. O justa, según se mire.

Y ahora que darías lo que fuera por tenerme, a mí se me ha olvidado el cariño. 


Ahora caminarás en mis zapatos hasta que haga memoria y vuelva a quererte.


FUERA DE CONCURSO


Shoefiti


Las blancas venían cargadas de imágenes que se deformaban configurando monstruos, peces y manchas abstractas; los nubarrones negros traían levante y los pájaros, posados sobre el cable eléctrico, anunciaban tormenta.


Pero yo buscaba los shoefiti que marcaban el territorio y me transportaban a paraísos artificiales mientras estuve enganchado.


Ahora, he abandonado la frontera de la raya blanca. Los zapatos de mi pasado posan sobre la tierra.


No quiero mirar atrás. Deseo salir de los márgenes, refugiarme en mundos inequívocos, mirar al futuro, vivir el presente, seguir adelante.


El único cable que tiene el control de tus pasos eres tú mismo.