RELATOS SEMANA 263

Autor José Pérez Ocaña 

 RELATO 1

EL REGALO DE DIANA

Diana celebraba su 18 cumpleaños cuando recibió un extraño dibujo con la siguiente nota: Esa eres tú y Ocaña, soy yo. Igualmente, le llegó un whatsapp que decía: “Felicidades. Cuando quieras nos vemos y te explico qué significas para mí, adorada criatura”. Tras una estruendosa carcajada, asombrada ante tal marabunta peniana, Diana le respondió: “Muchas gracias, Ocaña. Cuando puedas, please, envíame otro dibujo, en el que yo emerja suspendida en un universo femenino, rodeada de los atributos más sensuales de nuestra feminidad, donde el servil miembro viril no aparezca ni en tu imaginación. Se lo regalaré a Ariadna, mi pareja”.

RELATO 2

¡POR DIOS, POR DIOS!

Cuando visité aquélla sala no esperaba encontrarme con una imagen tan irreverente. Mi Virgen había sido sacralizada de forma tal que al verla me santigüé tres veces y horrorizado empezaron a subirme vapores que aceleraron mi respiración. 

¿Quién 

puede vanalizar así las creencias de las gentes de bien que veían aquella virgen fálica?

Por Dios! decían unos, ¿cómo puede ser? decían otros. Poco a poco se me fue pasando el sopor inicial dando paso a una sonrisa de complacencia que terminó en una sonora carcajada de todos los presentes cuando me percaté que estaba siendo grabado por una cámara oculta.

RELATO 3

DESEO

Me sacaron del pueblo para internarme en un colegio de franciscanas. Decía mi familia que tenía al pueblo revolucionado: «vaya pintas, con esos pelos de colores y esas minifaldas». 

Liarme con el hijo del alcalde fue lo último. Lo hacíamos a todas horas, en los jardines de Rallalón, en Puerta Grande, en la cochera de Berto…

Olía a incienso cuando entraban las franciscanas a misa; sus tocas sobre sus pelitos cortos, sus manos en oración, sus bocas chiquitas, su virginidad entre sus apretadas piernas… 

Me supe loca cuando miré a la virgen y aparecieron mil falos luminosos sobrevolando la sacristía.

RELATO 4

BENDITA SEA

En el calor de la noche 

pedí una oración

que cuatro ángeles me amaran

y desearan con devoción. 

Angeles divinos

con lenguas de fuego

que hicieran palpitar

con gozo mi despliego

Con cuatro cirios 

mi cama velaran 

y a cuál más grande 

mi deseo saciaran

Que uno me devorase

que otro me sometiera

y que poco a poco 

todos me cupieran 

Virgen de la polla

Virgen adorada

déjame que goce 

hasta la madrugada

RELATO 5

EL GRAN DESPROPÓSITO 

Celestina despertó en un lienzo, coronada por estrellas y rodeada de ángeles con ojeras eternas. Su túnica, bordada con garabatos anatómicos malintencionados, le picaba como un remordimiento. En las manos, un cetro fálico que latía con un entusiasmo un tanto sospechoso.

—¿Otra vez el Festival de lo Grotesco Sagrado? —suspiró.

Los ángeles aplaudieron con un fervor celestial. Todo aquello no era más que una gran broma divina y, para su desgracia, ella seguía siendo la reina; cosa que ya le pesaba.

Desde entonces, cada vez que alguien dibuja sin pudor… Celestina sonríe, resignada, como quien ya ha visto demasiado.

RELATO 6

EL TRONO CARMESI

Soñé con una diosa de pechos de fuego y corona de carne: madre, santa y hereje. Sus ángeles, con alas de deseo, alzaban cetros rojos y cantaban himnos impuros. La creación no nació del verbo, sino del gemido: un universo parido entre muslos y símbolos. Los cielos temblaron al verla dibujada en mi pared, donde antes colgaba un crucifijo. Ella me habló: “Soy el origen olvidado, el placer prohibido, la verdad censurada”. Desperté pintando con fiebre, poseído por su revolución. Desde entonces, los santos huyen de mi casa, y en mi altar, ella ríe. Ya no rezo. Ahora gozo.

RELATO 7

LA INDECISA

De adolescente se perdió fiestas, conciertos y cines por no saber qué ponerse o con quién ir.

Ya de mayor, soltera y sin gatos, por no saber de qué colores cogerlos, (obviamente) una amiga la arrastró a la fuerza a una quiromántica, para saber qué le depararía el futuro.

La primera carta que le salió fue la del amor frívolo, las pollas voladoras le indicaban que, de elegir esa carta, conseguiría un buen revolcón mínimo.

Llorando se fueron porque fue incapaz de señalar ningún pene.

La gata Flora, que si se la mete, chilla, y si se la saca, llora.

RELATO 8

MARÍA

“Por la calle de Alcalá, la florista viene y va, con los “nardos” apoyaos en la cadera” (pónganle música de zarzuela)

Así, cantando, con desparpajo y una mochila llena de productos de Sexshop, hacía María su entrada triunfal en las reuniones de tupper sex que organizaba con amigas y conocidas. 

El dinero no llegaba, y Mario … bueno, mejor de Mario no hablamos. Pero ella, hacia lo que hiciera falta por sacar a sus hijos adelante. La llamaban, LA VIRGEN DE LAS POLLAS. ¡¡Y a mucha honra!!

RELATO 9

VENGANZA

Una mujer dormía profundamente, desnuda, en la habitación del fondo del piso que comparto con Salva, la puerta estaba abierta.

Me asomé, quién no lo haría, en la oscuridad no podía dejar de mirar esas piernas infinitas, ese cuerpo, ese pelo rubio.

Cuando vi su rostro, era ella, era ella.

Imposible, me dije, lo mato, juro que lo mato, pedazo de cabrón.

De la cocina cogí un cuchillo.

Pensando en los doscientos euros que le dejé al joputa, cenita con una tía de la biblioteca, dijo. Mi chica.

Zas, zas, pues sin polla te quedaste, cortar, enfrascar... "Polla en Vinagre".

RELATO 10

LA DIOSA SAGRADA DEL PENE

Cuenta la leyenda… poco antes que la raza humana se extinguiera, se creó un santuario donde las mujeres peregrinaban durante semanas para poder ser bendecidas por la Diosa del Sagrado Pene.

Muchas desfallecían y morían en el intento y las que conseguían llegar, tenían que demostrar mediante pruebas durísimas que merecían ser fecundadas por el elixir de los últimos sementales vivos.

Un día, la Diosa del Sagrado Pene desapareció, llevándose consigo el elixir divino. Las mujeres, hartas de esperar la salvación, se clonaron entre sí, abolieron la dependencia y fundaron una nueva era: la de la fertilidad sin favores fálicos.

RELATO 11

NUNCA ES TARDE

La vida de Sor Carmen transcurría apacible en el colegio donde impartía clase de párvulos.

Entre tizas y recortables, enseñaba a leer a los alumnos más pequeños.

Una tarde se escapó uno de los peques, escondiéndose en el gimnasio de los alumnos mayores. 

Buscándole, entró por error en las duchas, viendo a los chavales desnudos. 

Desde entonces, cada noche repetía el mismo sueño. Ella en un altar con numerosos hombres ofreciéndole sus miembros viriles.

Sor Carmen desapareció un mes después, dejando en el despacho del director, su cofia y una nota que rezaba: _”Merezco otra clase de vida”_

RELATO 12

LA VIRGEN SANTA

Yo solo quería pedir a la Virgen para que me guardara la salud pero, no sé cómo, acabé rezándole a esta figura. Desde entonces, mi churri me busca para quitarme la ropa con pasión desenfrenada, cada día, como si tuviéramos veinte años. Y yo, la verdad, tan feliz. 

El otro día, risueña, Maruja me dijo «por lo que veo, a ti también te ha bendecido la Virgen de la Verga. Así estás, con ese lustre en la piel». Y yo, con las mejillas ardiendo, solo pude asentir bobamente, apretando la estampita en mi mano, que no se me escape.

RELATO 13

LA TERAPIA

El Dr. Quintana, psiquiatra, ya había tenido veinte sesiones con Purificación y no habían avanzado nada.

Su fobia a los hombres comenzó cuando, en su más tierna adolescencia, mientras besaba a un joven del que estaba enamorada, sintió que éste depositaba en su mano algo caliente y carnoso. Cuando bajó la mirada para ver qué era, vio que aquello salía de la bragueta de su pantalón. Tal fue el impacto que le causó, que nunca quiso "conocer varón".

_"Ayúdeme, doctor. Tengo 75 años... no quiero morir siendo mocita."_

El doctor la ayudó. 

La terapia funcionó... y quedó entre los dos.

RELATO 14

NADIE SE LO HABRÍA IMAGINADO

 

Adelante. Te estaba esperando. Siéntate, por favor.

 

Verás, ha llegado a mis manos cierta creación que has hecho. No te molestes en negarlo, está firmada por ti. Cuando lo vi no me pareció tan evidente, pero al darme cuenta de que la representada era yo…

 

De modo que, según tú, la jefa de estudios de este centro es una especie de virgen-diosa obsesionada con los penes. ¿No?

 

¡ME ENCAAANTA! ¡Me has plasmado a la perfección! Soy una persona muy sexual y que los ángeles-demonios se parezcan a mí porque representan a mis voces interiores es genial. ¿Me lo puedo quedar?

RELATO 15

EL PESCADOR LA PIEDRA ANGULAR

Él era el primer pescador y la piedra angular.

Señaló el horizonte, surgió el mar. El agua salada evaporada lo fue elevando, desintegrándose su vestimenta.

Desnudo, era una obra maestra única; su cuerpo tenía la capacidad de crear y creó.

A medida que ascendía, se volatilizaba. Era etéreo.

No sentía frío ni calor.

Dibujó el universo con trazos bellos.

Se convirtió en un rayo de sol.       

Martina, Jean, Robert, Alia, Shin, Mohamed, Ikram, Fode… miles en todo el mundo, diariamente, reciben con indiferencia la luz de vida, el brillo del astro rey.

RELATO 16

LITURGIA PARA PROFANAS

Ya canonizada nuestra amadísima madre superiora, entramos por primera vez en su celda, donde hallamos algo inquietante: un extraño volumen encuadernado en cuero titulado _El Evangelio de Lilith_. Un manuscrito que reivindicaba a la primera mujer, igual a Adán.

Los textos venían acompañados de dibujos grotescos: mujeres desnudas sosteniendo penes erectos, miradas lascivas, cuerpos en posturas imposibles...

Decidimos guardar el hallazgo en secreto. Cada noche, ocultas en nuestras celdas, nos sumergíamos en sus páginas. Al leer, sentíamos que algo se iba transformando en nosotras. Una atracción hacia lo desconocido, lo irresistible, lo divino.

No sabíamos si estábamos leyendo… o despertando.

RELATO 17

DOS MUJERES Y UN DESTINO

_1995_

Julia y María, empujadas por su devoción, eligieron entrar como novicias en un convento. No fue fácil para ellas integrarse y mantenerse firmes en su decision. Pasados unos años, aquella pasión por Dios se quebró al ser sorprendidas en actitud "indecente" en la habitación que compartían. Fueron expulsadas, y aquel hecho las separó para siempre...

_2025_

– Inspectora, hemos recibido una llamada de "La Virgen de las pollas". Hay un cliente fallecido de un infarto.

– Que nombre más irreverente... ¿Alguien que interrogar?

– Sí, la propietaria de la casa de citas.

– Vamos pues...

_Entrando en aquel sórdido lugar..._

– ¿Julia?

– ¡¡¡María!!!