![]() |
Foto Henk Heijmans |
RELATO 1
PERRO LADRADOR...
_- No! No puede ser! Increíble!_
_- Aficionado a la bolsa, quizá?_
_- Disculpe señora, la conozco?_
_- No creo, pero me preguntaba, qué asunto le preocuparía tanto, como para romper la calma que hasta que usted llegara, aquí reinaba._
_- Calma?_- gritó con desprecio.
_- Por qué piensa que lo que usted haga es más valioso que lo que hagan los demás, caballero?_
_- Vieja chiflada..._-murmuró con desdén.
_- Egocéntrico, egoísta... y además veo que es usted un maleducado._
_- Si no fuera porque es una mujer mayor...!_- amenazó alzando el puño.
_- Y machista. Hágalo, si siente necesidad. No vacile._
_- Además veo que es usted un cobarde._
RELATO 2
EL VUELO DEL RECUERDO
-¡¿Cómo puede decir eso?!
-Pero hijo, si solo es la tarta de manzana que...
-¡No soy su hijo!- Grita desesperado acercando su mano amenazante al rostro de la señora.
Una paloma blanca aterriza en el puño del señor. Él se detiene y la observa.
-Siempre te gustaron las palomas- Asegura ella sonriendo.
El semblante desconcertado del señor se suaviza. Suelta el periódico y toma las manos cansadas de ella.
-Mamá, ¿eres tú?-
-La tarta está en el horno- Asiente feliz ella.
El periódico, ahora en el suelo, muestra un artículo: El amor incondicional, el mejor antídoto contra el Alzheimer.
RELATO 3
NO SUFRAS EN SILENCIO
Mi nueva ruta incluye el parque central. No es mi lugar preferido, pero soy tan bueno en mi trabajo que obedezco y me entrego al 100%.
Ayer, mientras todos mis sentidos estaban alertas a lo que sucedía a mi alrededor, observé cómo un señor corpulento agitaba su puño frente a una tierna anciana. Reaccioné rápido y lo aparté de un empujón.
La sorpresa fue descubrir que no discutían, sino que el sospechoso ejemplificaba el tamaño de sus almorranas.
Afortunadamente todo fue un malentendido. Desgraciadamente no consigo sacarme de la cabeza el tamaño de ese puño y lo que estaba representando…
RELATO 4
INCONDICIONAL NOSTALGIA
Al salir del orfanato investigué, viajé para documentarme, solicité informes a diferentes instituciones… hasta que vi la luz donde confluían todos los puntos y el día que había anhelado toda mi vida.
La observé de lejos, menuda, frágil… pero, tras nuestro encuentro, reconocí que el amor que derramaron sobre mí las hermanas del convento y las personas que me guiaron, fue inmensamente mayor que el de mi propia madre. Un velo líquido anegó mis ojos.
Pese a ello, decidí que mi valía no dependía de un amor maternal ausente y, mordiéndome las lágrimas, logré abrazar una verdad amarga pero liberadora.
RELATO 5
MALTRATO
Era un hombre malo, malvado, nunca amo a nadie.
Ese día el nudo en el estómago apenas me dejaba respirar.
Golpes, lloros, actuando como si nada pasara, recogiendo mi alma rota en mil pedazos.
Recuerdo el traslado en ambulancia.
Ya no olería a alcohol, sin gritos, ni insultos.
Martina no debía notarlo, hoy se tatuaría una sonrisa enorme debajo de esa tristeza.
Con la inocencia de quién apenas ha vivido y la sabiduría de haber sufrido demasiado pronto.
Grité: "Es tarde, que venga la luna que me quiero dormir". Y mis ojos ya no volvieron a abrirse. Por fin descansé.
RELATO 6
LA MADRE QUE ME PARIÓ (Y OTRAS REFLEXIONES)
Parece mentira que mi madre siga haciéndome sentir como un niño cuando hago algo que no le gusta.
Ayer me sorprendió leyendo los resultados de las carreras de caballos mientras fumaba un puro. Bueno, pues le sentó fatal porque consideraba que ese tiempo debía pasarlo con ella, que parirme le costó mucho sufrimiento porque fui muy grande y ella es muy poquita cosa, que iba a morir más pronto que tarde,...
Solo espero que nadie de _la banda_ me viera caminando tras ella con la cabeza gacha. Al fin y al cabo soy todo un capo de la mafia chicagüense.
RELATO 7
PURO PEDIGRÍ
Juan de Dios había salido a su padre, pero sólo en lo físico. Su verdadera casta, simétrica y competitiva era la de su madre. Tenían las mismas obsesiones y se apasionaban con las mismas cosas.
Creció como el perfecto hijo único, amado y consentido, pero con una querencia desmesurada hacia su progenitora. Nunca se casó y siempre estaban juntos, sobre todo desde que ella enviudó.
Nunca pudo olvidar aquel terrible día de 1964 en que falleció de un ataque al corazón. Acababan de celebrar entusiasmados, con puños en alto, el triunfo de España contra la Unión Soviética, ganando la Eurocopa.
RELATO 8
VÍNCULO INFINITO
Viuda y con un niño, en tierra extraña pues era portuguesa en Italia, tuvo que ganarse la vida a empujones, trapicheando y haciendo lo que fuera necesario para sacar adelante al crío, hermosísimo y grandísimo como su difunto marido.
Siendo aún adolescente, su hijo comenzó a colaborar en el _"negocio"_ de su madre, montando broncas callejeras, con el fin de afanar carteras ajenas.
Pero el tiempo pasa inexorable, y la mujer ya no estaba para esos trotes.
Era fácil verles discutiendo en algún banco de la calle.
_"¡Mamá! tú quédate aquí, que estás muy torpona y nos van a trincar"_
RELATO 9
AMOR VERDADERO
Nunca nadie apostó un duro por su relación, pero ellos, contra todo pronóstico, se empeñaron en ser felices, y pese a las malignas habladurías vecinales, ya llevaban casados, (felizmente) cuarenta años. Él tenía 62 y ella 84. Podía vérselos a diario sentados en un banco del parque, él con su periódico y ella con su bolsa de la compra en la mano. ¿Qué comeremos hoy cariño?
Verduras mi amor, ya sabes que has cogido mucho peso y no te conviene para los pies.
Yo quiero pollo frito.
¿Decidimos como siempre?
¡¡Vale!!
¡Piedra, papel tijeras!
¡¡PIEDRA!! ¡¡He ganado!! ¡¡POLLO FRITOOOO!!
RELATO 10
ADORNOS
Mi vecina Casilda era analfabeta. Desde pequeño le leía las cartas que recibía de su hijo encarcelado. Cuando la carta no tenía buenas noticias, la adornaba con relatos felices. Así aliviaba su dura vida. Usando ese método de lectura improvisada, desarrollé una habilidad para inventar historias al leerle los titulares del periódico:
“Descubren un bosque encantado en pleno Corazón Urbano, donde los árboles susurran melodías”,
“Esta noche tendrá lugar una lluvia de estrellas que concederán deseos a todos los que la contemplen”,
“Una comunidad de hadas es descubierta en un bosque, demostrando que la magia aún persiste”.
Hoy soy escritor.
RELATO 11
SIAMO COSÌ (NOSOTROS SOMOS ASÍ)
¿Quién ha dicho que a los italianos no nos gusta discutir?. Dame cinco minutos y sabrás lo que es una charla entre amigos.
"Mamma mia, ma que cosa dice, signora"
"Non sa che è impossibile"
“Parece que sí, o bueno no, podría ser que ni sí ni que no”
Toda la vida discutiendo.
"Impossibile mio amico"
Lo llevamos en nuestros genes pero eso no significa nada
"se io e te non litighiamo è perché non siamo amici"
Claro que sí. Si tú y yo no discutimos no seríamos amigos. O bueno, también puede ser que no.
Discutamos y lo sabremos.
RELATO 12
UN AMARGO SABOR DULCE
Mark fue abandonado a los tres años. Apenas recordaba comer helado sentado en un banco junto a una mujer.
Tras recorrer todos los bancos de Chicago, uno le llenó de desasosiego, que él tradujo en nostalgia.
Y allí, todos los días, de cinco a siete, esperaba a "alguien". Esas dos horas el banco era suyo y así lo afirmaba, con grandes aspavientos, que alejaban al más bravucón.
Pasaron treinta años, y un día, una bella anciana se sentó a su lado. Sólo con mirarla sintió el sabor del helado en el paladar, y supo que era ella.
Su madre.
RELATO 13
AMOR DE MADRE
“¡Adivina qué tengo aquí!”, exclamó el hombre con entusiasmo. La mujer, sonriendo picaramente, respondió: “¡Una hamburguesa!” Él abrió su puño revelando una moneda. Ella mostró una bolsita de patatas fritas. Ambos estallaron en risas. Jugaban a "Adivina qué es" con tentempiés escondidos. Después, descubrieron que olvidaron la bebida. Se dirigieron a un dispensador automático cercano, riendo mientras insertaban monedas. Al compartir una lata de refresco, brindaron por su día lleno de risas y complicidad. Así, en medio de pequeñas sorpresas y gestos simples, su amor seguía creciendo, sumando otro recuerdo inolvidable a su lista de días felices.
RELATO 14
LA MUJER DEL BANCO
No supe donde buscarla y temí lo peor.
Nunca más volví a verla en aquel banco donde nos encontrábamos cuando yo salía de la oficina. Rodeada de palomas, con sus manos y su falda llenas de migas de pan. Vivía al tanto de los problemas del país. Me fascinaba escucharla hablar del 36, de la España dividida, con todo lujo de detalles. Me hacía preguntas sobre inteligencia artificial, nos llamaba locos.
Ahora que no la veo, echo de menos su escucha. Su curiosidad por la vida y esa lentitud para observar el mundo que no he encontrado en otra parte.
RELATO 15
MI NIÑO DE LOS SUEÑOS
Perdí mi bebé, me separé.
Ese torbellino, hundió en aguas oscuras mi mente. Emergí de lo profundo. Me ofrecí como voluntaria en un hospital oncológico. Ahí le cogí su manita por primera vez; sentí su soledad, su mirada pedía cariño. Era un niño de la calle. Lo operaron.
Reíamos, recorríamos el país de Peter Pan:
Estudió medicina se casó con su amiguita del hospital, tuvo hijos sanos.
Se hizo fuerte, nos saludábamos chocando nuestros puños. Envejecí, él me cuidaba.
Mi pequeño amiguito se fue para siempre al mundo de los sueños. Cogí su mano inerte.
Él me sanó el alma.
RELATO 16
GRANDULLÓN ENFADADO
María ya no recordaba al grandullón que cada mañana leía el periódico enfadándose.
Había algo en su mirada y en su tono que le llevaban a lo más profundo de su corazón, pero de ahí no conseguía salir.
¿A dónde irían en ese autobús? Sólo apreciaba un profundo cariño enternecedor hacia él, un amor infinito que no se agotaba ni gastaba cada día en su regreso a la residencia.
Era la última parada antes de la despedida de aquel ser mágico que despertaba su cerebro y colocaba sus neuronas en lo más profundo de su alma. Su presencia me llenaba, me retornaba.
RELATO 17
LA MAMMA SIEMPRE TIENE RAZÓN
Dña. Vittoria, bajaba a la calle para hablar con su _figlio Luciano_, su _hipopotamito_. Le daba igual que perdiera los nervios, y aguantaba tranquilamente sus malos modos. Ella solo quería que dejara de arriesgar su vida haciéndole trabajitos de vigilancia a la _Cosa Nostra_.
Desde el balcón de su casa, estaba a punto de presenciar lo que más temía. Vio como se acercaban dos sicarios directamente hacia él. Bajó corriendo, paraguas en mano, y empezó a repartir paraguazos provocando la huida de los malhechores y llamando la atención de toda la calle.
El siguiente en recibir, fue su _hipopotamito_.
No hay comentarios:
Publicar un comentario