![]() |
Foto: Puzzle Schmidt "Galaxia aleatoria" |
RELATO 1
¡A BORDO!
Faltaba muy poco para que empezase la Navidad y los padres de Miguel llevaban horas corriendo de un lado para otro, limpiando y acabando los preparativos para la cena.
No tenían tiempo para él, no podía sacar sus juguetes, ni comer nada de lo que olía tan bien hasta que llegasen los demás. Miguel se aburría mucho y quería divertirse. ¿Qué se supone que debía hacer mientras esperaba?
Se fue a su cuarto y, muy silenciosamente, sacó de debajo de la cama su nave espacial mágica. Pulsó el botón de desaparición y viajó a la velocidad de la luz hasta llegar al espacio. ¡Una nueva aventura comenzaba!
Llegó a una galaxia en la que los tacos y burritos convivían flotando junto a los planetas y le pareció buena idea activar la palanca de transformación para convertir su nave en un trozo de pizza. Además, pulsó el botón “animal” y se convirtió en un simpático perezoso. Lo mejor era que podía teñir todo de colores con sus rayos láser de arcoíris. Estaba pasándolo muy bien cuando oyó un golpeteo.
“¡Cariño! ¿Estás vistiéndote? Los primos están a punto de llegar”
Miguel cerró su cuento. Retomaría su aventura en otro momento de necesidad.
RELATO 2
"HISTORIAS"
Con cinco años, su mente convertía cada pensamiento en un dibujo y cada frase, en un bocadillo de tebeo.
Las historietas que creaba solo eran para ella, sus manos no sabían trasladarlas al papel.
Aquella tarde, inspirada por la visión de una fotografía del periódico, quiso pedirle prestado el teléfono a mamá para llamar a la niña de la foto, que parecía muy triste. Antes de que la frase saliera de su boca en nubecita de cómic, la tachó. Pensó que quién alegraría a esa niña sería su muñeco de trapo, el osito Filomeno.
Y eso hizo.
Le lanzó al espacio sideral, viajando en un pedazo de pizza, para que, con su visión arco iris ultravioleta, animara a la niña, y a todas las que se encontrara por el camino.
"Todas las cosas buenas acuden a la llamada" pensó con contumacia.
Y mandó chuches, nubecitas de azúcar, tacos y nachos calentitos.
Tardó en darse cuenta de que la quimera que había creado seguía en su cabeza y no saldría de ahí hasta que sus manos no se pusieran en marcha.
Y con el tesón que le caracterizaba, a los 16 años público su primer comic.
"Historias de Gaza" se llamaba.
RELATO 3
DE MOLINOS Y GIGANTES
Era un diciembre frío. Las hojas rojizas caían como confeti tras las tormentas otoñales y se entrelazaban con las primeras migajas de turrón que se deslizaban de los labios en medio de animadas conversaciones.
Sofía y Valeria, junto a su grupo, avanzaban por la empedrada calle peatonal. Algo captó la atención de Sofía. Un joven, montado en su monopatín, descendía por la avenida, desafiando la gravedad y la lógica, como un perezoso cósmico surcando galaxias de tacos y pizzas. "¡Mira, Valeria!", exclamó Sofía. "¡Es increíble!"
Valeria, su gemela, su fiel escudera, le susurró: "No son gigantes, son molinos", anclándola a la realidad. Aun así, la mente de Sofía seguía desafiando esos molinos que su mente convertía en titanes.
Valeria, con un gesto furtivo, escribió un WhatsApp: "Mamá, creo que Sofía olvidó de nuevo su medicación. No te preocupes, siempre juntas." Después, se unió al grupo, se acercó a su hermana, le dio un abrazo eterno y la besó fuerte en la mejilla. Su apoyo incondicional era el mejor regalo que Valeria podía hacerle a su hermana durante estas Navidades, durante el resto de su vida, y es que los mejores regalos no vienen envueltos en papel brillante.
RELATO 4
REY POR UN DÍA
Lo escogieron por ser negro. Buba llevaba pocos meses en el pueblo trabajando en los invernaderos cuando su jefe le propuso un trabajito extra: disfrazarse de rey antiguo y tirar caramelos a la gente durante un desfile. Le pareció un trabajo fácil y aceptó a pesar de no entender de lo que se trataba. Al principio pensó que el objetivo era mofarse de él. No le importó. Necesitaba dinero y estaba acostumbrado a las humillaciones y a los desprecios. Pero desde el primer momento descubrió algo inesperado. Los niños lo aclamaban llamándolo Baltasar, lo miraban sorprendidos, lo saludaban con cariño y le pedían caramelos. Y así todo el tiempo. Cuando terminó y volvió a la cuadra donde compartía colchones en el suelo, sartenes, cazos y hornillos de camping con otros compañeros de trabajo, le explicaron que los españoles decían que ese día era mágico. Y Buba supo que esa magia era verdad porque nunca olvidó la inmensa felicidad que lo envolvía aquella noche mientras se entregaba al sueño recordando las sonrisas de los niños.
RELATO 5
NOCHE DE REYES...¡Y PIZZA!
La mañana de Reyes, Rodrigo se levantó aturdido tras una noche de pesadillas.
Todo empezó con un dolor de barriga, pero aguantó sin despertar a su madre porque, de todas las noches del año, esta era la menos indicada para permanecer despierto...era la Noche de Reyes.
Consiguió dormir a ratos y sus sueños no fueron para nada dulces sino más bien "pesadillas saladas".
El día anterior había ido a la cabalgata con sus padres como todos los años. Se había portado muy bien y esperaba que los Reyes atendieran su carta sin reservas y sin carbón, por supuesto.
Después del paso del cortejo, sus padres siempre le permitían comer lo que más le gustaba: pizza de salami...¡y se hinchó hasta que no pudo más!
Esa noche la pizza cobro vida en su barriga y se convirtió en una auténtica pesadilla.
En sus sueños aparecían trozos de pizza surcando el espacio sideral mientras la supermorsa atómica trataba de fulminarlas con su mirada láser.
Tanta batalla lo dejó exhausto.
Cuando su madre le pregunto al día siguiente si quería comer otra vez pizza, salió corriendo hacia el baño gritando:
¡Nooooooooooooo, nunca más!
RELATO 6
EL HÉROE SILENCIOSO
Érase sólo una vez, en una galaxia remota, donde las reglas humanas no alcanzaban, que se rumoreaba que un ladrón burlaba la seguridad de los restaurantes intergalácticos más exclusivos. Los testigos hablaban de un ser ágil, peludo y silencioso. Su firma era inconfundible: al amanecer, desaparecían enormes bandejas de tacos, pizzas y burritos.
Las cámaras de vigilancia nunca captaban más que un destello de luz arcoíris. El personal, exasperado, revisaba los registros una y otra vez. Algunos decían que era un bandido alienígena; otros, que era un fantasma vengador de la comida desperdiciada.
Una noche, el chef de un restaurante flotante decidió quedarse a vigilar. Armado con un desintegrador, se escondió tras el mostrador. Y ahí lo vio: un perezoso gigante, deslizándose lentamente sobre un rayo de luz, cargando con cajas de pizza y montones de burritos. El chef quedó paralizado, no tanto por el animal, sino por lo que escuchó en las transmisiones del ladrón: risas infantiles.
Siguiendo al perezoso en secreto, descubrió su destino final: un asteroide habitado por niños olvidados de la guerra galáctica. Con la panza llena y sonrisas brillantes, dormían sin hambre bajo las estrellas, protegidos por su silencioso héroe.
RELATO 7
LOS SUSURROS DE LA CASA ENCANTADA
Los capullos dorados se abren a los rayos del sol, que traspasan las nubes de formas caprichosas, cubriendo el campo de amarillo, verde; el olor a miel y perfumes se mezclan, revoloteando mariposas coloreadas.
El serpentino camino asciende hasta la encalada casa, con contraventanas azules, macetas floridas, movidas por el viento.
En estío, las playas se cubren de bañistas. La casa brilla reflejando el calor.
Hojarasca crepitando bajo las pisadas, el rojizo de los castaños colorean las paredes.
Hay aroma a castañas asadas.
La casa duerme sobre las blancas montañas. El techo de tejas rojizas enmohecidas, nevado. La chimenea humeante escribe con un lápiz invisible, “esta es una casa mágica”. El fuego dibuja formas fantásticas, susurrantes al chisporroteo de los leños.
Llega la Navidad.
Los niños jugamos con la nieve, hacemos muñecos… Atravesamos la puerta encantada, está el mantel de cuadros, Papá Noel, alimentos, golosinas de arcoíris, elaborados por nuestra madre. El árbol navideño con lazos rosas, plateados azules…rematado por una estrella, guarda bajo sus ramas regalos.
Nuestro padre, con sus manos encallecidas, pasa páginas de cuentos que nos lee.
La noche cubre de magia nuestros sueños. La magia del amor de nuestros padres.
RELATO 8
COLORÍN COLORADO
Desde el pais de la "fantasía", gobernado por _Strump_ y su lugarteniente _Muskoni_, allá por el año MMXXIV, con la ayuda de sus departamentos de IA, fue lanzado al espacio y a los medios de comunicación de todo el mundo, el personaje de _Tumorín_. El mismo, tenía la inocente misión mediante su rayo multicolor, de enviar a los niños a la cama a una hora saludable. Pero detrás de esa intención, se ocultaba la verdadera misión de aquel personajillo, que lanzando sus rayos destellantes, dejaba a los niños en un estado de somnolencia extrema, y al día siguiente, al despertar, les invadía la necesidad de consumir comida basura y todo tipo de merchandising, gafas, camisetas, juguetes, todos ellos de la marca comercial _Tumorín_.
Pero en algún lugar escondido de la península ibérica... Un pequeño genio de la informática descubrió la trampa, y la manera de contrarrestar esta atroz abducción a los niños del mundo, consiguiendo borrar aquella invasiva imagen, y convirtiéndola en, _Cleo, la mayor de las niñas de la familia telerín_, tirando por tierra la manipulación de los críos, y la multimillonaria inversión de unos enfurecidos _Strump y Muskoni_.
Y colorín colorado, por favor, acabemos con este peligroso cuento.